Mercedes Vitoria formaliza el acuerdo con el comité que evitará el ERTE

«Este acuerdo muestra a la plantilla que, de manera inequívoca, afrontamos esta situación complicada de forma corresponsable y mirando en equipo y con confianza hacia el futuro», se asegura en clara referencia a la producción de la VAN/EA, la plataforma que permitirá el desarrollo de los vehículos 'full electric' a partir de 2027. Se trata de un pacto que se ha comunicado a los trabajadores este jueves, en vísperas del acto simbólico de colocación de la primera piedra de las futuras instalaciones que albergará la factoría de la Avenida de los Huetos para la fabricación del citado modelo. Un acto programado para el próximo martes al que asistirá el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez; el lehendakari Iñigo Urkullu y destacados representantes del grupo automovilístico alemán.

Como ya ha venido avanzando EL CORREO en los últimos días, el pacto contempla la creación de 100 nuevos contratos indefinidos con criterios objetivos. Adicionales a los relevistas (Contratos de Relevo), 50 contratos indefinidos antes del 30 de abril de este año mientras que el resto, hasta que finalice el año. Asimismo, una vez agotada la flexibilidad actualmente recogida en el convenio colectivo, se acuerda la posibilidad de realizar una cancelación adicional de 15 días laborables una vez alcanzado el límite negativo de -144 horas (-18 días), que es que se establece en la Cuenta de Referencia del Convenio Colectivo para este año.

Este nuevo límite de la citada cuenta de horas, durante el año actual podrá ampliarse hasta en 60 horas adicionales (hasta un debe de 204 que los empleados contraerían con la empresa). Y, según reza el acuerdo, en lo que se refiere a «la distribución de la carga para todas las personas trabajadoras con independencia de cual fuera el saldo de su cuenta flexible una vez una vez superado el límite negativo de -144 horas de la cuenta de referencia, por cada jornada cancelada-», cuatro serían asumidas por la compañía (50%) y 4 irían a la cuenta flexible del trabajador (50%).

En este punto, el trabajador podrá optar entre descuento de salario o de cuenta flexible (el descuento salarial será equivalente al aplicado en el grado de ocupación en función de la duración del turno de noche), se subraya. En síntesis, la fórmula plantea que de cada jornada suspendida, la empresa abonaría la mitad del horario y el resto se contarían como horas pendientes.

«En el caso de las personas trabajadoras con reducción de jornada, el número de horas será proporcional a la duración de la jornada individual. Por ejemplo, en caso de una persona con una jornada de 4 horas, 2 horas irían a la cuenta flexible y las otras 2 serían asumidas por la empresa por cada jornada cancelada», se explicita.

La empresa se compromete además a que en el programa de producción del mes, comunicado 10 días antes del final del mes anterior, «no podrán convivir jornadas activadas con jornadas suspendidas». Y por otro, en caso de que una jornada fuera activada (día de lunes a viernes activable o sábado de producción), de forma general teniendo incidencia en la cuenta de referencia, (más del 75% de la plantilla del turno/turnos) «deberían transcurrir al menos 20 días naturales hasta la cancelación de una nueva jornada»

En este sentido, se establece el preaviso de una semana para advertir a las personas que tuvieran que acudir a trabajar en jornadas suspendidas. En el caso de que debiese acudir personal a trabajar en jornadas suspendidas o canceladas «se tendrá en cuenta la situación particular en cuanto a saldos y tipo de contrato del personal». Si se agotaran los 15 días adicionales de suspensión, y la empresa tuviera necesidad de suspender o cancelar hasta cinco jornadas más durante 2024, «se aplicarían las mismas condiciones recogidas en el acuerdo. En este caso, el nuevo límite de la cuenta de referencia, durante el año 2024 podrá ampliarse hasta en 20 horas adicionales pudiendo alcanzar un nuevo límite negativo de -224 horas».

Si se agotaran estos 15 días adicionales de suspensión, y la empresa tuviera necesidad de suspender o cancelar más de cinco jornadas durante 2024, o tuviera que poner en marcha un ERTE en 2024, «la empresa condonaría un 25% del tiempo asumido por el trabajador o trabajadora desde el límite negativo actualmente recogido en convenio colectivo, independientemente de la opción elegida, descuento de salario o de cuenta flexible. Si la opción hubiera sido «descuento de salario», el reintegro se aplicaría sobre el salario descontado.

Son las grandes líneas de un compromiso que se ha formalizado el mismo día en el que Mercedes Vitoria ha comunicado a la plantilla parará la producción cinco días más los dos próximos meses. Se suspenderá la actividad, salvo en aquellos departamentos cuyo cometido se considera imprescindible, los días 24, 25 y 26 de abril. Tres jornadas más en ese mes que se suman a las cuatro jornadas de la Semana de Pascua (2, 3, 4 y 5 de abril) que inicialmente la empresa había contemplado como laborables. A esas jornadas se sumarán dos días más en mayo, en concreto, el 2 y el 3.

Una cancelación de días para ajustar la capacidad productiva de la planta a las demandas de los mercados, como se ha venido subrayando en los últimos meses. Y que afectarán a todos los sectores productivos de la factoría (Montaje Bruto, Pintura y Montaje Final). Como viene siendo habitual, estará afectado todo el personal directo, indirecto y coaligados «con la excepción de aquellas personas que sean requeridas para llevar a cabo tareas de necesaria realización».