Mercedes Vitoria cancela otras dos jornadas de trabajo en octubre

Una vez más, y como es costumbre en la Avenida de Los Huetos, la dirección apunta a «la necesidad de ajustar la capacidad productiva de la planta a las demandas de los mercados» como la causa del ajuste. La falta de pedidos viene lastrando todo el curso a la factoría, que se sitúa ahora mismo lejos del objetivo de hacer 140.000 furgonetas, que era la meta que se fijó a principios de año.

La suspensión de estas dos jornadas no son dos días más. Supone agotar la primera bolsa de jornadas 'extra' que se dieron comité y empresa para evitar el ERTE. El pacto entre trabajadores y dirección, llegados a este punto, daba la posibilidad de extender otros cinco días esta bolsa de desactivaciones. Ahora en algunos turnos quedarían apenas cuatro jornadas más dentro de ese acuerdo.

En un comunicado a su afiliación, el sindicato Comisiones Obreras (CC OO) ya apunta a octubre como un mes clave. Será entonces cuando «se presentará la planificación del programa de producción de 2025 y discutiremos las medidas que sean necesarias par abordar el final del año 2024 y 2025».

El impacto de las paradas está notándose ya en la marcha de la economía vasca. El último dato en reflejarlo fue el de las exportaciones, con una caída del 7,4%. Las furgonetas generan uno de cada diez euros de las ventas al exterior. Y las salidas de furgonetas de Mercedes hacia el extranjero se han hundido un 23,8% en la primera mitad del año.

La bajada de pedidos viene generando también problemas en algunos de los proveedores de la Avenida de Los Huetos. El caso más reciente es el de Gonvarri, cuya planta de Burgos aprovisiona a Gestamp Bizkaia y esta deriva sus productos a Mercedes Vitoria. Los 84 trabajadores de la firma se vieron obligados a pactar un ERTE con la dirección para capear el mal momento productivo de la planta que dirige Bernd Krottmayer.