Grifols sufre en Bolsa un nuevo ataque de Gotham

El nerviosismo se hizo patente con una caída en la cotización de Grifols que superó el 7,5% en los peores momentos de la sesión. Sin embargo, al cierre las caídas se moderaban al 0,36%, ante la evidencia de que el nuevo informe no aportaba grandes novedades en torno a las acusaciones de falsedad contable que el pasado 9 de enero desataron un auténtico caos bursátil y reputacional en la empresa.

Pese a ello, la reacción inicial del mercado ha vuelto a poner sobre la mesa que esa crisis de confianza sigue muy patente en el ánimo de los inversores, a pesar de los recientes movimientos acometidos por la compañía, como la propia denuncia contra Gotham en EE UU o el cambio en su cúpula directiva para desligar a la familia de la gestión empresarial.

El nuevo documento, de apenas una página y media de información, Gotham se limita a indicar que esos cambios «nos indican que al menos algunas de nuestras preocupaciones son válidas». Y vuelve a poner en duda la legalidad de la operación por la que tanto Grifols como Scranton consolidan al mismo tiempo en sus respectivos resultados a dos sociedades, Haema y BPC, que la firma vendió a su accionista en 2018.

El fondo solicita que se aclare esta relación y todo lo que tenga que ver con transacciones financieras y préstamos entre ambas sociedades. Y pide que especifique cuánto controla la familia Grifols de Scranton, a pesar de que en una reciente presentación a analistas la firma ya indicó que ese porcentaje era de menos del 20%.

Ante las dudas desatadas, Gotham también reta a la compañía a contratar una firma de contabilidad forense independiente para que investigue las prácticas contables. Cabe recordar que Grifols contrató a Baker McKenzie para ello, pero desde Gotham critican que esta es una firma de abogados, no de contabilidad forensic.

«Grifols ha manifestado su posición de forma clara desde el principio y ha presentado toda la información requerida por el regulador», indican a este medio desde la compañía. Pese a ello, aún se desconocen las conclusiones de la investigación de la CNMV, cuando ha pasado casi un mes y medio desde aquel informe en el que Gotham acusaba a la compañía de ocultar deuda, provocando una auténtica debacle bursátil de la que el valor aún no se ha recuperado.

Antes de publicarse el documento, sus títulos cotizaban en 14,24 euros, muy por encima de los 10,93 que ronda ahora. «Grifols desmiente categóricamente las insinuaciones maliciosas, falsas y engañosas de Gotham que tiene como único objetivo desestabilizar a la empresa y generar dudas entre los inversores», insistió ayer la compañía en un comunicado remitido a la CNMV.