La belga VGP arranca la recta final del desmantelamiento de La Naval

Por otra parte, fuentes conocedoras del proceso de desmantelamiento de las instalaciones han indicado que aún quedan algunas máquinas que deben ser retiradas por sus nuevos propietarios -fueron adjudicadas por el juzgado en la liquidación de lotes de la empresa-, así como equipos técnicos propiedad de Van Oord. Son equipos que debían haberse instalado en el 'Vox Alexia', que pertenecen al armador y que están valorados en decenas de millones de euros.

El siguiente paso será la urbanización de la parcela para su nuevo uso, aunque todo apunta a que la compañía belga se va a ver obligada a reconsiderar su proyecto inicial. La decisión del Gobierno vasco de declarar Bien Cultural de Protección Especial varios edificios del antiguo astillero, así como los diques, ha echado por tierra el primer planteamiento que había realizado VGP. Una opción que pasaba por derribarlo todo y construir grandes pabellones, con capacidad para ser modulados, destinados a albergar actividades logísticas y también industriales. La normativa urbanística de Sestao obliga a que al menos el 50% del terreno -en total casi 300.000 metros cuadrados- tenga que dedicarse a actividades industriales.

La decisión del Ejecutivo vasco no sólo ha complicado a VGP el proyecto que ya tenía sino que, además, va a permitir a las instituciones tener una mayor capacidad de influencia sobre el destino de esta superficie. Así, VGP, además de verse obligada a mantener los bienes que se han inventariado en buen estado, tendrá que solicitar la autorización de la Diputación de Bizkaia para cualquier actuación que quiera realizar en ellos.

Como ya es conocido, tanto las instituciones como los sindicatos han exigido a VGP que priorice las actividades industriales y en especial las que tengan alguna relación con la industria naval. El temor es que la firma belga opte por todo lo contrario. Esto es, por poner el acento en el alquiler o venta de pabellones para actividades logísticas -almacenes-, que cuentan con gran demanda en la actualidad pero generan un empleo de salarios bajos. Por el momento, VGP mantiene en secreto sus intenciones sobre el futuro de este terreno que adquirió como mejor postor en la liquidación judicial de bienes de La Naval.