Borrar
Cristina Garmendia une a su faceta de empresaria e inversora a la de doctora en Ciencias Biológicas. josé Ramón Ladra
«El empresario vasco se caracteriza por el rigor, pero le falta una dosis de audacia»
Cristina Garmendia | Fundadora de Ysios Capital

«El empresario vasco se caracteriza por el rigor, pero le falta una dosis de audacia»

La exministra considera que el compromiso de Euskadi con la I+D es un aval, pero echa de menos una mayor colaboración para ganar tamaño

Domingo, 16 de agosto 2020, 16:09

Cristina Garmendia cuenta con una atalaya privilegiada desde la que tomar el pulso a la economía española y vasca. La exministra donostiarra de Ciencia e Innovación es miembro de varios consejos de administración, preside la Fundación Cotec, y es fundadora y socia del fondo Ysios, con sede en la capital guipuzcoana. Garmendia apela a un pacto político que sirva para sacar rápido a España de la crisis. Respecto a Euskadi, subraya que el alto grado de compromiso con la tecnología de las administraciones y de las empresas son un aval. Eso sí, pide a los empresarios vascos una mayor dosis de audacia para promover fusiones y adquirir tamaño.

- La pregunta del millón, ¿cree que la crisis será larga y profunda o saldremos rápido de ella?

- Ahora ya tenemos datos contrastados pasa saber que la crisis va a ser muy profunda, sin duda. En cuanto a su duración, dependerá en gran medida de la altura y liderazgo de nuestros representantes políticos. La eficacia con la que se implementen las medidas sanitarias y económicas requiere colaboración leal entre los políticos y entre las diferentes administraciones. Hay que ejecutar un presupuesto histórico con los menores errores posibles.

- ¿Existe esta lealtad?

- Es mejorable. La sociedad no puede admitir deslealtades, porque es muy grave lo que nos ha pasado y lo que nos va a pasar. Sin salud no hay economía y, por tanto, es urgente reforzar el sistema de rastreo de contactos para evitar un nuevo confinamiento, una situación que sería letal para nuestra economía. Este objetivo requiere compartir los datos y conocer los flujos de personas.

- ¿Cree que habrá presupuestos, dada la bronca permanente entre los partidos?

- Igual soy demasiado optimista, pero quiero pensar que los grandes partidos llegarán a un acuerdo. Sin presupuesto no hay recuperación. Si los líderes no son capaces de alcanzar un acuerdo, que convoquen elecciones.

- ¿Cómo ve el pulso de la economía vasca?

- Sufrirá, como todas, pero cuenta con buenos mimbres. La respuesta a la pandemia está muy condicionada por las capacidades de los territorios y éstos son determinantes para la recuperación económica. En la Fundación Cotec consideramos que hay cuatro capacidades básicas para el correcto desarrollo de la sociedad y así poder afrontar la crisis: las sanitarias, las educativas, las tecnocientíficas y las industriales.

- ¿Cuál es el diagnóstico sobre nuestras capacidades tecnocientíficas?

- Euskadi en general defiende desde hace décadas una economía basada en el conocimiento. Destaca por estos datos, pero especialmente por el compromiso inequívoco del tejido empresarial. El 75% de este esfuerzo es privado, un porcentaje similar a los grandes países con una economía basada en el conocimiento.

- Hasta ahora ha destacado las fortalezas del tejido productivo vasco pero, ¿cuáles son las debilidades?

- El empresario vasco se caracteriza por el rigor, la seriedad y la humildad, pero quizá a estos elementos positivos y que no debemos perder, habría que añadir unas dosis de audacia. Echo de menos una colaboración empresarial valiente que lleve a desarrollar nuevos proyectos compartidos, a fusionarse con otras compañías, porque necesitamos crecer para adquirir más tamaño. Hay que crecer rápido y bien, porque para ser competitivo en este mundo hay que invertir en activos intangibles, como la I+D+i, software, bases de datos, formación... La escala es muy importante para hacer este esfuerzo hacia la economía del conocimiento.

- ¿Qué es lo que falla para que no se dé ese paso?

- Lo cierto es que se han hecho varios intentos, pero no han fructificado. No es por falta de instrumentos, creo que es algo cultural, nos falta la actitud de querer compartir proyectos e ideas. Vamos a fiarnos los unos de los otros y vamos a establecer las reglas del juego. Vamos a estudiar proyectos de fusión donde sumando capacidades podamos lanzar proyectos más competitivos.

Cómo ha vivido el confinamiento

«Hay que gestionar las brechas de desigualdad que se van a abrir»

- Esta crisis está dando lugar a frases rotundas como, por ejemplo, 'vamos hacia un mundo diferente'. ¿Cree que es así o este es un lugar común?

- En pocos meses nos hemos digitalizado lo que estaba previsto en varios años. Hemos adelantado el futuro, así que nuestro presente ya es diferente. Ahora bien, tenemos que ser capaces de gestionar las brechas de desigualdad que sin duda se van a abrir. Por ejemplo, es urgente atender la adecuación de la formación. No somos diferentes, somos los mismos, pero vivimos en un mundo diferente.

- ¿En todo este maremágnum dominado por la ciencia y la tecnología, qué papel tiene la industria?

- Ha perdido peso en el PIB español y en consecuencia hemos visto nuestra dependencia de las cadenas de suministro globales. No obstante, la industria también ha demostrado flexibilidad, porque ha sido capaz de fabricar respiradores o 'epis' cuando no estaba preparada para ello.

- ¿Qué se puede hacer para depender menos de China o de otros países manufactureros y con costes más reducidos?

- El 'shock' que han padecido las energías fósiles debería servirnos para rediseñar nuestros circuitos de producción y consumo. Hay que potenciar nuevas dinámicas alineadas con las políticas europeas y una de ellas es la economía circular, porque supondrá depender menos de la industria extranjera, una mayor soberanía tecnológica y una mejora medioambiental.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcorreo «El empresario vasco se caracteriza por el rigor, pero le falta una dosis de audacia»