Los comercios cerrados son el mejor exponente de la pandemia en España. efe

«La empresa no se mantiene viva por ley», dice la patronal ante las dudas por los ERTE

La nueva ola de expedientes por el cierre de la hostelería en Euskadi afecta ya a casi 5.000 empleados

Viernes, 13 de noviembre 2020, 00:12

«La empresa no se mantiene viva por ley». La reflexión de Iñaki Garcinuño, el presidente de la patronal vizcaína Cebek, resume el sentir de los empresarios por todas las dudas que plantean los ERTE con el impacto de la segunda ola del coronavirus. Y ... además, con muchas preguntas sin resolver: si podrán seguir acogiéndose a los ERTE después de enero; si tiene sentido echar mano de ellos puesto que impiden despedir; si habrá más ayudas... En Euskadi, en tres días, se han pedido cerca de 1.500 para casi 5.000 trabajadores.

Publicidad

Todo esto está provocando que muchas compañías, pese a estar sufriendo los efectos de esta segunda ola, opten por no acudir masivamente a un ERTE como sí hicieron en marzo para poder realizar despidos. Porque disfrutar de los beneficios de estos expedientes -las exoneraciones de las cuotas a la Seguridad Social- tiene una contrapartida: la prohibición de ajustes en medio año.

«Las empresas no están recurriendo a los ERTE», admite el presidente de Cepyme, Gerardo Cuerva, que considera que fue una «buena medida» que ayudó a que casi cuatro millones de trabajadores no perdieran su trabajo, pero que ahora se ha quedado «obsoleta». De hecho, a falta de datos oficiales, sí se sabe que el número de expedientes por fuerza mayor o por causas organizativas y de producción ha disminuido sensiblemente, según confirmaron a este periódico fuentes cercanas al Gobierno.

«Las incertidumbres son gigantescas. Si quieres un mercado laboral rígido, no hay como prohibir»

Iñaki Garcinuño | Presidente de Cebek

Los ERTE están perdiendo vigor porque impiden el despido. Y hay una segunda razón, estima Cepyme: que no se han aprobado por un largo periodo de tiempo como en otros países -Alemania-, lo que genera gran incertidumbre. Además, se lamentan de que sea la única medida que tienen las empresas para contener el gasto y aseguran que los ERTE por sí solos no pueden funcionar, ya que tienen que ir acompañados de moratorias en los alquileres, más líneas de créditos ICO, rebajas de impuestos...

Publicidad

El líder patronal vasco Garcinuño introduce otra consideración. Las firmas que hasta ahora no han echado mano de los ERTE, pero que sí necesitan hacer ajustes en estos momentos, se enfrentan a la eventualidad de que todos los despidos sean declarados por la Justicia improcedentes, con lo que ello supone de incrementos en las indemnizaciones.

En Cepyme han dejado ya de esperar ayudas del Gobierno y aconsejan a los negocios que comiencen a ajustar gastos, lo que puede hacerse a través de despidos, rebajas salariales, negociando un nuevo alquiler, la deuda... Y la CEOE ha advertido de que algunos despachos de abogados están aconsejando a las empresas que, vistos los números, abandonen la idea de acogerse a un ERTE y recurran a despidos o un ERE.

Publicidad

Es más, hay compañías que incluso están reembolsando a la Seguridad Social el dinero que se han ahorrado con la exoneración en las cotizaciones de sus trabajadores, ya que no pueden esperar al plazo acordado para despedir; otras se plantean hacerlo, según avisa UGT. Práctica que también ha detectado la organización de autónomos ATA.

En Euskadi también hay casos de este tipo, aunque no generalizados. Lo que sí hay es un aluvión de consultas en dos sentidos. De un lado, provenientes de empresas que no encajan en ningún supuesto de ERTE y que por tanto no pueden acogerse a las exoneraciones. Y por otra, de firmas que solicitaron un ERTE, se plantean ahora ajustes y no saben cuánto deben devolver: si por todos los empleados implicados en un principio o solo por los que se verán afectados ahora por los recortes. El líder de UGT en Euskadi, Raúl Arza, añade otra duda más. «La empresa puede devolver el dinero, pero el trabajador ya ha cobrado el ERTE. ¿Tiene que devolverlo también? Cómo se resuelve eso, porque el ERTE sigue vivo».

Publicidad

El Banco de España

Todo esto concuerda con el aviso que ayer lanzó el director general de Economía y Estadística del Banco de España, Óscar Arce: los ERTE podrían reducir su «idoneidad» si la crisis se alarga y las empresas necesitan reestructurarse y hacer ajustes laborales.

Al margen de las preguntas sin responder, Trabajo ha recibido en los tres primeros días de esta semana, tras el cierre de los bares en Euskadi, 1.467 solicitudes de ERTE para 4.861 empleados. Son en su mayor parte de hostelería y de suspensión de actividad, aunque hay excepciones en las que se ha pedido reducción de jornada: una firma de fabricación de maquinaria de Bergara -101 afectados-; un centro de educación deportiva de Getxo (59) y un centro de distribución de frutas al por mayor de Sondika (41).

Publicidad

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Accede todo un mes por solo 0,99€

Publicidad