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Mikel Barandiaran, consejero delegado del grupo Dominion. BORJA AGUDO

Dominion insiste en comprar empresas medioambientales

La compañía cree que la Bolsa «no reconoce» todavía su auténtico valor

m. alvarez

Sábado, 26 de febrero 2022, 01:59

La empresa vasca Dominion va a insistir en la estrategia de adquirir empresas para sumarlas a la corporación, que obtuvo en 2021 un récord de beneficio con 42 millones de euros. Tras varios años de 'sequía de compras', está dispuesta a retomar esa senda, aseguró ... ayer su consejero delegado, Mikel Barandiaran. La empresa, con sede en Bilbao, cuenta con 10.615 empleados repartidos en 35 países.

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Con actividades tan diversas como la digitalización, los servicios de mantenimiento de instalaciones industriales, la comercialización de energía y las telecomunicaciones, Dominion ha puesto su objetivo ahora en crecer en el «área medioambiental». La búsqueda de empresas para ser adquiridas se complementa con importantes proyectos ya en marcha en el desarrollo de parques eólicos y fotovoltaicos y en la construcción de una línea de transmisión eléctrica en Angola.

Barandiaran aseguró que la empresa «no ha fijado un presupuesto concreto para esas adquisiciones», ya que prefiere mantener una actitud flexible y «estar abierta a cualquier oportunidad». Incluso se refirió a la existencia de negociaciones, que por el momento no han fructificado, para adquirir alguna compañía de tamaño mediano.

Uno de los problemas de Dominion, aseguró Barandiaran, es la pobre valoración que hace el mercado financiero, pese a los buenos resultados de los últimos años, a su política de crecimiento e incluso a la recurrencia de algo más de la mitad de los ingresos -contratos de largo plazo- y a la prudente política financiera. La empresa tiene una posición de liquidez envidiable, de ahí que se haya lanzado a una operación de recompra y amortización de sus acciones como vía para aumentar la remuneración de los accionistas. «La Bolsa no reconoce el valor real de la compañía».

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Prueba de la contradicción es que justo tras darse a conocer unos resultados con récord en beneficios y facturación -por encima de 1.000 millones sin contar la venta de teléfonos-, la Bolsa castigó la cotización con un retroceso del 1,16%.

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