No dejar a nadie atrás

En este momento, las subidas de precios y el paro estructural son las principales amenazas para la economía. Mejorar el funcionamiento del mercado de trabajo, aumentar la productividad y establecer una hoja de ruta en materia fiscal, son algunos de los principales retos. Para ello hacen falta reformas de calado y seguir apoyando a las empresas y la inversión privada, que son el motor del crecimiento sostenido.

Además, no debemos olvidar el principal desafío: la sostenibilidad. Nuestro país tiene factores a favor, como sus recursos naturales y los fondos europeos, pero es necesario invertir más en tecnologías que permitan la transición, lo más justa posible, hacia una economía descarbonizada.

Los bancos jugamos un papel crítico en la economía, somos dinamizadores de la actividad a través de la concesión de crédito, algo que cobra especial relevancia en el entorno actual.

Durante la pandemia, dimos un paso al frente. Ahora, desde BBVA mantenemos el mismo compromiso de seguir al lado de familias y empresas para mitigar en lo posible el impacto de esta nueva etapa de incertidumbre, sin dejar a nadie atrás.