Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
fernando segura
Lunes, 11 de noviembre 2019, 00:05
«No es cierto que las empresas grandes se coman a las pequeñas, son las ágiles las que salen adelante, mientras que las lentas cierran». Este es el 'leit motiv' que ha guiado la carrera profesional de María Ángeles Amenabar, gerente de la cooperativa Zubiola ... desde 1989 hasta 2007. Hoy jubilada, sigue activa en asociaciones como Secot y Helduak Adi, que quieren potenciar la experiencia de las personas mayores en apoyo de proyectos liderados por jóvenes emprendedores. La exgerente azpeitiarra ha sido galardonada con el Premio Joxe Mari Korta, galardón que se instituyó en 2000 tras el asesinato del empresario guipuzcoano, entonces presidente de Adegi.
- ¿Qué ha supuesto para usted haber sido galardonada con el premio Korta?
- Una sorpresa y un gran honor.
- ¿Conoció a Joxe Mari Korta? ¿Qué supuso el atentado y cómo lo recuerda usted?
- Coincidimos en una ocasión, en un vuelo a Europa. Indirectamente, un compañero de mi equipo mantenía una fuerte relación personal desarrollada durante años, compartiendo el mismo grupo de cicloturistas. Esto hizo que este atentado lo viviera como algo más familiar, más cercano. Y respecto al hecho en sí… no tengo palabras. Cualquier atentado contra la vida humana no tiene sentido ni razón. Personalmente estoy convencida de que la violencia no es la vía para solucionar ningún problema.
- Usted fue gerente de la cooperativa Zubiola desde 1989 hasta 2007. ¿Qué recuerdo guarda de esa etapa al frente de la empresa?
- Muy positivos. Cuando asumí la gerencia la viabilidad de la firma estaba en duda y, posteriormente, su situación económica se vio comprometida varias veces por diversas causas. Pero a mí siempre me han gustado los retos y la gestión. Entre todos salimos adelante, porque no es cierto que las empresas grandes se coman a las pequeñas, son las ágiles las que salen adelante, y las lentas las que cierran. Realmente he disfrutado de mi trabajo.
- Una mujer al mando de una plantilla mayoritariamente de hombres y en un sector, el de maquinaria para mecanizado de madera, muy masculinizado.... ¿Encontró dificultades para desarrollar su labor?
- En Zubiola no. En una cooperativa el liderazgo y la gestión están sometidos a la asamblea general y al consejo rector, por lo que siempre me sentí apoyada por la mayoría. Fuera sí. En aquellos tiempos no era nada habitual ver una mujer gerente, por lo que a veces me he tenido que enfrentar a situaciones incómodas.
-¿Cree que las mujeres están en el escalafón que les corresponde en el mundo de la empresa o sigue existiendo el 'techo de cristal'?
- Poco a poco se están consiguiendo retos importantes, siempre en base a grandes esfuerzos. Pero todavía hay que trabajar mucho para que la mujer se encuentre equiparada en los niveles superiores de las estructuras empresariales.
Jubilaciones anticipadas: «Existe poca conciencia de lo que supone dejar de lado la experiencia de las personas mayores»
- ¿Las cooperativas siguen siendo un modelo económico eficaz en un mundo globalizado?
- Claro que sí. La eficacia no depende del tipo de empresa, sino de la capacidad de gestión, del liderazgo, compromiso y participación de las personas que la componen.
- ¿Cuáles son sus fortalezas?
- Yo no creo en fortalezas específicas de las cooperativas respecto de las no cooperativas. El futuro depende en primer lugar de una buena planificación estratégica que diagnostique con precisión y crudeza su propia realidad, que sea rápida en descubrir las alternativas posibles en un entorno cambiante, que no titubee en abordar y ejecutar los cambios necesarios y que utilice el cambio mismo para realizar el avance.
- ¿Y las debilidades?
- En una cooperativa cada socio es dueño de la empresa y tiene un voto. En consecuencia, la estrategia pasa igualmente por conseguir su satisfacción. Lo que podría parecer una debilidad es una ventaja, porque explicar la estrategia a un colectivo numeroso supone un trabajo interno de depuración y clarificación que facilita enormemente su implantación. Es decir, que en la medida en que los miembros de la cooperativa se sienten parte del proyecto y lo perciben como suyo, aumenta su eficiencia. Ese fue nuestro reto. Por otro lado, siendo una empresa pequeña hay que saber rodearse de entidades que te ayuden en la implantación de nuevas tecnologías y modelos de I+D, gestión, organización y producción. Nosotros contamos con Ikerlan, LKS, Euskalit y la Corporación Mondragón.
- Las prejubilaciones están a la orden del día. ¿Se está despreciando la experiencia de los mayores o se trata de una medida lógica porque hay que dejar paso a las nuevas generaciones?
- Evidentemente, quienes se jubilan tienen una capacidad, desde su experiencia vital, que debería ser aprovechada por la sociedad. En su origen es algo parecido al problema de género, en el que partiendo de una desigualdad y desaprovechamiento de las capacidades de las mujeres en la sociedad, actualmente hay conciencia del problema y apoyo institucional. En el caso de los mayores, existe poca conciencia de lo que supone dejar de lado su capacidad, ya que representamos aproximadamente el 20% de la población.
- ¿Hay que cambiar la percepción sobre este colectivo?
- El enfoque actual solo nos ve como demandantes de recursos para resolver problemas de dependencia, apartándonos de todo centro de decisión. Obviamente, no se trata de cerrar el paso a las nuevas generaciones, lo mismo que la incorporación de la mujer a la sociedad no ha supuesto relegar a los hombres. Es un problema de sentido común, de aprovechar todos los recursos de la sociedad para, en definitiva, vivir mejor en un mundo más justo e igualitario.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.