Rementeria critica la «improvisación» en la adopción de medidas fiscales

RementerIa ha realizado esta defensa de la fiscalidad vasca, que incorpora también una crítica a lo que está sucediendo en el Estado, en el arranque del congreso de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos que lidera Isidro Fainé, el presidente de la Fundación La Caixa y de Criteria, la corporación que aglutina sus inversiones. El congreso de directivos, que contará con la participación del rey Felipe VI, ha reunido en el BEC de Barakaldo a un millar de destacados empresarios y altos ejecutivos.

El Congreso se ha articulado a través de varias mesas redondas en las que destacados líderes empresariales y también institucionales han debatido en torno a los retos del futuro. Esta es la tercera ocasión en la que CEDE elige el País Vasco para celebrar su cita anual, tras las convocatorias de 2007 y 2011.

La presidenta del comité organizador, Amaya Gorostiza, consejera de varias empresas y presidenta de lA Sociedad Deportiva Eibar, ha destacado en la apertura del congreso la evidencia de que «nos encontramos ante un nuevo mundo, condicionado por las consecuencias de la pandemia y la situación geopolítica actual». Gorostiza ha señalado la necesidad de que los directivos de empresas ejerzan «liderazgo, adaptabilidad e iniciativa», al tiempo que ha destacado la necesidad de incrementar las vocaciones empresariales entre los más jóvenes.

Aprovechando la presencia de importantes directivos y empresarios de toda España, RementerIa ha aprovechado para hacer una 'tarea comercial' en el intento de atraer inversiones y poniendo en valor «la capacidad normativa» de las instituciones vascas. En ese contexto, el diputado general vizcaíno ha destacado «la estabilidad institucional y la seguridad jurídica» que ofrece en estos momentos el País Vasco, frente a las turbulencias políticas que aquejan al resto de España.

En ese contexto ha defendido la necesidad de que las decisiones fiscales que se adopten «tengan en cuenta la necesidad de cuidar el tejido empresarial para no ponerlo en peligro», en una clara alusión al nuevo tributo que el gabinete de Pedro Sánchez ha anunciado para las entidades financieras y las empresas energéticas. En su opinión, «en momentos delicados como los actuales hay que mirar a largo plazo y evitarla improvisación», una característica ésta que es en estos momentos el hilo conductor de algunas de las decisiones que adopta el Gobierno central en materia fiscal.

Por su parte, Isidro Fainé, en su discurso de clausura, ha mostrado su respaldo a la estrategia desplegada por los bancos centrales, que incluye la subida de tipos de interés, con el objetivo de evitar el recalentamiento de la economía y las consecuencias de una inflación desbocada. También ha pedido una pública en la que “las empresas no sean el enemigo a batir. No somos el problema, no somos la solución, pero sí somos parte de la solución. Y queremos contribuir a la solución junto al sector público”.

Fainé ha desmitificado la trascendencia de la tecnología e incluso de la digitalización en el futuro crecimiento económico para indicar que, siendo factores importantes, los más decisivos son “el empresario, los equipos directivos y los empleados. Está bien que haya un departamento de investigación y desarrollo en las empresas, pero es más importante que toda la plantilla tenga espíritu innovador”.