Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Los concesionarios vascos sufrieron un duro golpe en el año de la pandemia, cuando las ventas de coches se desplomaron en Euskadi un 24%. Para empezar hubo seis cierres, hasta quedar la red en 100 establecimientos; y la caída en la facturación fue del ... 17,3%, hasta los 1.458 millones de euros, según datos publicados ayer por la federación Faconauto. El sector, que ha empezado este 2021 todavía peor, lastrado por el alza del impuesto de matriculación, advierte de que si no se toman medidas de impulso puede haber un recorte estructural de empleo en el ejercicio. De esta actividad dependen 6.525 puestos de trabajo en Euskadi.
6.525 es el número de personas que actualmente trabajan en el sector en Euskadi. La red de concesionarios está compuesta por 100 establecimientos tras cerrar seis en 2020.
Tras cerrar un año aciago, en los concesionarios hay mucha preocupación por lo que puede deparar el actual después de sufrir el peor enero de la historia, con un descalabro en las ventas del 33%. «En febrero el panorama sigue igual de negro, con un descenso en la afluencia del 60%. Han tenido mucho impacto las restricciones a la movilidad y el alza del impuesto de matriculación», señala Jon Lekue, presidente de la Asociación de Concesionarios de Bizkaia. Considera necesario que el Gobierno vasco ponga en marcha un nuevo Renove como el de 2020, que limitó la caída en las ventas al 24% en Euskadi frente al 32% nacional. «Pero aún no hay respuesta», dice.
Volviendo a la facturación del año de la pandemia, en Euskadi el área que más sufrió fue la del vehículo nuevo, con una caída del 18% hasta los 1.063 millones de euros. Por su parte, el negocio del vehículo usado descendió un 11,3% hasta los 250 millones. Y en posventa se movieron 145 millones.
En el conjunto de España los concesionarios facturaron 35.895 millones de euros en 2020, un 19% menos. El golpe en el empleo fue mucho menor, del 5%, con una pérdida de 8.000 puestos de trabajo hasta los 153.425 trabajadores. En este sentido, Faconauto destacó que los ERTE han sido «esenciales» para mantener los puestos de trabajo, aunque advirtió de que si el mercado no remonta, «difícilmente» las empresas podrán mantener sus actuales plantillas.
«De lo que pase hasta junio dependerá, en gran medida, que esta crisis coyuntural no se convierta en estructural», señaló el presidente de Faconauto, Gerardo Pérez. A nivel nacional también se urge al Gobierno central para que ponga en marcha un nuevo Renove, dado que el de 2020, muy poco exitoso, apenas consumió el 20% de su presupuesto y sobraron 200 millones de euros. La asociación considera que debería ir acompañado de un plan de achatarramiento sin compra.
El sector alerta de que la rentabilidad se desplomó el año pasado a un nivel «raquítico», con una media del 1,2%. No obstante, casi la mitad de los establecimientos finalizó el año con una ratio inferior al 0,5%.
La asociación advierte de que habrá que esperar hasta 2022 para que el sector recupere las ventas que tenía antes de la crisis, los 1,2 millones de matriculaciones. En el año del Covid las ventas se desplomaron un 32% hasta las 851.000 unidades. Para el actual ejercicio, Faconauto baraja dos escenarios: uno optimista, en el cual espera que se rebase el millón de matriculaciones; y otro pesimista, con un mercado inferior a esa cota. La evolución, explicó la organización, dependerá de la rapidez con la que se produzca la vacunación y la normalización de la movilidad. Por otro lado, y de cara a los fondos europeos, la asociación ha presentado una propuesta para movilizar 500 millones en los próximos tres años.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Noticias recomendadas
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.