Bruselas anuncia una investigación a las ayudas chinas para la producción de coches eléctricos

El programa de subsidios chino ofrece exenciones fiscales por valor de unos 72.000 millones a los consumidores que adquieran vehículos eléctricos hasta 2027. En la práctica, esto provoca que el precio de los coches eléctricos chinos se mantenga más bajo «artificialmente» gracias a estas ayudas. Von der Leyen ha destacado ante el hemiciclo que la industria automovilística -clave para economías como la alemana- y el «gran potencial« que ofrece la producción de vehículos limpios para Europa. »Pero los mercados mundiales están inundados de coches chinos más baratos», lo que acaba perjudicando a los vehículos europeos.

La política ha asegurado que Europa «está abierta a la competencia», pero no a prácticas desleales que «están distorsionando el mercado». Desde el inicio de la invasión rusa en Ucrania, Bruselas ha defendido la necesidad de «reducir riesgos» y «eliminar dependencias externas», en particular en la importación de materias primas críticas de China.

Europa también mira con preocupación el mercado estadounidense, después del anuncio de ayudas estatales por valor de 349.000 millones de euros al desarrollo de tecnologías verdes. La presidenta del Ejecutivo comunitario mantuvo una reunión con el presidente Joe Biden para abordar esta cuestión y lograron un acuerdo para el suministro de litio y níquel a Europa, claves para la industria verde. También pactaron que los vehículos eléctricos europeos podrán recibir unos 7.000 euros en ayudas impositivas, pero que para ello deberán ensamblarse en en Estados Unidos y la mitad de los componentes de sus baterías deberán ser locales.