«La sede de CaixaBank está en Valencia con carácter indefinido y no está bajo revisión»

- ¿Cómo afrontan en Euskadi la carrera por captar clientes?

- Hemos estado centrados estos años en abordar la integración de Bankia. Ahora entramos en una fase de crecimiento en la que nuestra dirección territorial, que abarca Galicia, Asturias, Cantabria y País Vasco, es la única en la que no somos líderes por razón de esas absorciones y fusiones. Así que el gen del crecimiento lo tenemos muy interiorizado.

- ¿En qué cifras se concreta el crecimiento?

- Tenemos 400.000 clientes y queremos crecer con un modelo de banca universal que tiene una apuesta clara por la empresa. Y, dentro del plan estratégico, nos planteamos sumar 100.000 clientes en tres años a través de una red de 131 oficinas y otras 16 de empresas.

- ¿Mantendrán esa estructura?

- Sí. El ajuste de la red ya lo hicimos. No queremos restringir nada, algunos clientes serán en un momento digitales porque han visto algo en la web y, en otro momento, querrán estar con su gestor. Vamos a facilitarlo, pero el entorno cada vez es más digital, por eso invertiremos 5.000 millones en tecnología.

- Si BBVA materializa su opa sobre el Sabadell, ¿se verá afectada la competencia?

- Sobre esa cuestión, no opinamos. Lo que sí tenemos claro es que el nivel de competencia de la banca en España es de los más altos de Europa. Independientemente de que la fusión se produzca, no va a poner en riesgo la competencia. El cliente puede estar tranquilo.

- Tras el movimiento del Sabadell regresando a Cataluña, ¿se replantea lo mismo CaixaBank?

- Como ha señalado nuestro consejero delegado en innumerables ocasiones, nuestra sede está en Valencia con carácter indefinido y no está bajo revisión.

- La firma de hipotecas está creciendo mas de un 50%, ¿hay un riesgo de burbuja?

- No. Es verdad que han crecido las ventas y han subido los precios, pero hay un nivel de ahorro importante y el porcentaje del préstamo sobre el valor es razonable. Estamos en la ortodoxia financiera, no se está cometiendo ninguna locura que se pudo hacer en el pasado.

- Pero los precios están dificultando el acceso a la vivienda. ¿Aciertan las medidas anunciadas por el Gobierno?

- No, porque no hay suficiente oferta. Hay que ayudar a la demanda, sí, pero hay que construir más, disponer de más suelo y acortar el plazo de las licencias.

- ¿Y la financiación a las promotoras?

- Es un negocio complicado que requiere mucho endeudamiento. Para concederles crédito uno de los aspectos más importantes es el nivel de preventa. Es muy difícil que se financie una promoción sin esa condición.

- ¿Cómo ve a Euskadi en 2025 con la crisis industrial europea?

- Nuestro departamento de estudios, con un 2,4% de crecimiento, es más optimista que el Gobierno vasco. La inversión tiene que tirar sí o sí porque los costes de financiación se van a reducir sensiblemente.

- ¿A pesar del impuesto a la banca? ¿Afectará al crédito?

- Bueno, no lo digo yo, lo dice la presidenta del BCE, Christine Lagarde. El impuesto redujo 150 millones de la obra social y la retribución a los ahorradores. Está afectando y puede hacerlo al crédito. Es injusto y no beneficia a la economía.

- ¿La reforma fiscal de las diputaciones es suficiente para que las empresas vascas recuperen competitividad?

- Hay una pérdida creciente del peso de nuestra economía y, aunque veo sensibilidad en las administraciones, faltan empresarios. La reforma tiene algunas medidas que ayudan, pero es un poco insuficiente. Para traer inversión a Euskadi necesitamos alguna cosa más.

- La Fundación La Caixa ha respondido al Ayuntamiento de Bilbao con un proyecto de arte y tecnología para el Azkuna Zentroa. ¿Qué espera?

- Como vasco, que un proyecto de este calado elija Bilbao como primera sede en España, me parece muy positivo. Más, atendiendo al respaldo de la Fundación, con una dilatada experiencia en cultura y ciencia. Es una prueba más del compromiso de la obra social que suma una inversión en Euskadi de 12 millones.

- ¿La polémica pone sobre el alquiler del espacio lo pone en riesgo?

- Corresponde a la Fundación y a las autoridades. Pero, en lo personal, me parece una polémica estéril y una pena que cuestionamientos partidistas lo empañen.

- ¿Echa de menos al expresidente José Ignacio Goirigolzarri?

- Hombre, lo sigo manteniendo como amigo. Es verdad que me gustaba que el presidente de la entidad fuera vasco, pero espero ahora poder disfrutar más de su presencia. Ha sido un grandísimo presidente.