La AIReF estima que Euskadi fue la comunidad que menos creció en la recta final de 2023

El organismo que preside Cristina Herrero ha hecho esta aproximación al crecimiento regional en España a partir de un dato más general, el de la evolución del PIB español calculado por el Instituto Nacional de Estadística, INE. Según este organismo, en el cuarto trimestre de 2023 el aumento del valor de los productos y servicios generados en España creció el 2%, en comparación con el mismo periodo del año anterior. A partir de ese dato y de algunos indicadores mensuales como las ventas minoristas, el consumo de combustibles, las autorizaciones de nuevas viviendas o la demanda de crédito -utiliza 11 índices en total-, anticipa un reparto regional de ese crecimiento. Y las diferencias son importantes.

Así, según la AIReF la economía vasca fue la menos dinámica en el cierre del año, en lo que cabe interpretar como un efecto directo de la desaceleración europea y con ello de las exportaciones industriales. Un mercado clave para la economía vasca, que si bien no ha llegado a entrar en crisis sí que está deprimido y en especial en lo que afecta la industria. Sin embargo, ese 1,3% de crecimiento contrasta con las regiones que tienen en el turismo su principal fuente de riqueza, porque ahí es donde ha estado el epicentro de los aumentos más acusados en el PIB. Y es que en el último trimestre de 2023 la economía de Canarias creció el 3,8% y la de Baleares el 3,2%, dentro del proceso de recuperación de ese sector tras los devastadores efectos de la pandemia.

En los datos intertrimestrales -la comparación de lo que sucedió en el cuarto trimestre del año en comparación con el tercero-, también el País Vasco ocupa el pelotón de cola. Sin embargo, en este caso ese último puesto es compartido con otras regiones como Asturias, Galicia, Cantabria, Navarra y Andalucía.

La AIReF no aporta valoraciones cualitativas sobre la composición de este crecimiento regional, al tiempo que advierte que la volatidad de los datos es de tal magnitud que no descarta que sus apreciaciones estén sometidas en el futuro a revisiones significativas. Lo cierto es que el Instituto Vasco de Estadística, Eustat, discrepa bastante de esos cálculos de la Autoridad independiente fiscal, porque según los últimos datos el crecimiento interanual de la economía vasca en el cuarto trimestre del pasado año fue del 1,6%. Tres décimas más que la tasa reportada por el organismo dedicado a vigilar la disciplina fiscal.

Esa fotografía de retraso vasco que arroja la AIReF contrasta, sin embargo, con las previsiones elaboradas por otros organismos de estudios para el presente 2024. Así, por ejemplo, BBVA estimaba la pasada semana que la economía vasca se situará a la cabeza del crecimiento económico en España en el presente ejercicio, pese a que está descartada una recuperación intensa de la demanda de los países del entorno. En concreto, ha pronosticado un crecimiento del PIB vasco del 1,9% este año, frente al 1,5% del conjunto de España. Para BBVA, las posibilidades de crecimiento del sector turístico comienzan a estrecharse, con aumentos estimados del PIB de Canarias y Baleares que no sobrepasarán el 1,6% en el conjunto del año.