Agotado el Renove vasco de coches tras una avalancha de última hora

El fin del Renove ya estaba anunciado después del tirón de las ventas experimentado en verano. Pero se esperaba que al menos durase una semana más e incluso dos. Sin embargo, la avalancha de este lunes y este martes sorprendió al EVE y le obligó a darlo este miércoles por cerrado. Esta entrada en masa de expedientes ha sucedido a un mes de agosto en el que las matriculaciones crecieron en Euskadi un 14%, hasta las 2.911, frente a una caída del 10% en el conjunto de España. Se consolidaba así la mejora iniciada en junio, que llevó después al mejor julio de la década.

El Renove ha sido, en gran medida, el sostén de la recuperación de las ventas en el País Vasco durante estos tres meses. Eso sí, fue necesario que el Gobierno vasco lo reforzase, porque tras su lanzamiento en febrero apenas tuvo éxito. Fue en junio cuando dobló el presupuesto y también elevó las ayudas -hasta los 2.000 euros en el caso de los diésel y los gasolina-. Este aumento frenó la caída de las matriculaciones en junio.

En julio llegó la explosión, después de que el Ejecutivo de Sánchez lanzara su propio plan e incluyera por fin a todos los motores. Además permitió por primera vez sumar las ayudas del programa nacional y autonómico, lo que arrojaba subvenciones históricas de hasta 3.600 euros para los coches de combustión. Las ventas se dispararon en julio un 34% en Euskadi y en agosto, otro 14%.

Este impulso ha llevado a la Asociación de Concesionarios de Bizkaia a mejorar sus previsiones para el conjunto del año. Antes esperaban un desplome del 45% en las ventas y ahora reducen el descenso al 30%, justo la caída que acumulan las matriculaciones en los ocho meses ya transcurridos.