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José Javier Zabaleta asombró en el partido del Izarraitz de Azpeitia que la noche del miércoles puso el cierre a la tercera jornada del Campeonato de Parejas. «Está en el mejor momento de su carrera», afirma convencido Ladis Galarza padre. «La pelota le ... sale como un tiro», añade Rubén Beloki.
Elezkano II y Zabaleta son líderes tras derrotar 22-15 a Altuna III y un Mariezkurrena II que no perdió la cara en el peloteo en ningún momento y castigó también atrás. Sucede que enfrente tuvo a un zaguero inaccesible que no se sintió en dificultades ni en el cuadro ocho ni en el nueve, terreno donde sufren el 95% de los pelotaris.
123 partidos suma Zabaleta en el Campeonato de Parejas, 122 de ellos como titular. No ha dejado de jugar un solo encuentro en ocho participaciones.
61% de victorias presenta en su balance de resultados: 76 victorias y 47 derrotas. Ese porcentaje se eleva al 70% en los cuatro últimos años.
«Zabaleta está de diez, con un juego terrible», insiste Galarza III. «En Azpeitia hizo todo bien. Le veo además con una confianza enorme en sí mismo. Eso se nota cuando buscas las losas altas y no se te escapa ninguna pelota arriba. Metes todas donde quieres».
«Lleva tiempo a un nivel muy alto», opina el de Baraibar. «No es cuestión de unos meses. Ha adquirido regularidad y rinde bien casi siempre que salta a la cancha. Hay otro detalle que refleja lo que es el actual Zabaleta. En la jornada anterior, en Zalla, jugó poco y a pesar de ello fue capaz de ganar. Eso significa algo».
Los halagos de Galarza III van más allá: «Dentro de todas las cosas que está haciendo bien, me quedo con su capacidad para quitar pelota desde el cuadro ocho y del nueve. Fíjate si Mariezkurrena II jugó bien en Azpeitia. El de Berriozar no tiene el golpe violento de Zabaleta, pero pone lejos la pelota. Pues José Javier coge altura con las dos manos y vuelve a ponerla lejos. Eso está reservado a unos pocos. No da ninguna facilidad».
Habla el doble campeón manomanista en 1991 y 1992 de la desesperación que semejante actuación de un zaguero provoca en el delantero contrario, en este caso Altuna III. «Cuando tienes mucha pelota para rematar, actúas sin ninguna prisa y aciertas a la primera oportunidad. Cuando dispones de pocas ocasiones, entras desde el tres y medio o el cuatro con ganas de acabar a la primera porque sabes que tardarás en tener otra, y no te sale bien ninguna. Es lo que le pasó a Jokin en Azpeitia. Pero ojo. Si Mariezkurrena II mantiene el nivel que demostró en el Izarraitz, veo muy arriba a esa pareja».
Rubén Beloki confiesa que «vi a ratos» el choque del Izarraitz. «Me dio tiempo a disfrutar con Zabaleta. Poderoso y con chispa, la pelota le sale con un brillo especial de la mano. Mariezkurrena dio la cara, estuvo serio y puso lejos la pelota. Sucede que enfrente tuvo a alguien que tiene un don para la pelota».
El de Burlada añade que «además es bonito verle jugar. Posee tal elegancia... Se mueve rápido. Tiene todo para jugar. Si a esos pelotazos espectaculares que pega a medio frontis les diera un poco más de altura, firmaría tres o cuatro rebotes por partido».
Le llama la atención a Beloki que «mantenga esa chispa a los 29 años. Yo había perdido bastante a esa edad. No se le ha ido. Añades a eso el punto de madurez que ha alcanzado y te encuentras con un zaguero capaz de marcar una época y al que me gustaría ver mano a mano. Es lo que echo en falta. Ya sé que ha cambiado la manera de jugar, pero semejante pegador debería lucir en el Manomanista».
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