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juan pablo martín
Martes, 1 de septiembre 2020, 00:24
En el undécimo partido llegó su primera victoria. Era cuestión de tiempo porque la mejoría mostrada en los últimos encuentros vaticinaba que estaban cada vez más cerca, pero tenían que conseguirla. Urrutikoetxea e Irribarria estrenaron ayer su casillero de triunfos en el Torneo CaixaBank de ... parejas mixtas en el frontón Santi Brouard de Lekeitio frente a Peio Etxeberria, sustituto del lesionado Jaka, y un desafortunado Albisu. El vizcaíno y el de Arama hace ya varias jornadas que no tienen nada que hacer con respecto a la clasificación, pero alcanzar el cartón 22 les reafirma en su trabajo de cara al final de la liguilla. El varapalo es para el navarro y el de Ataun, que se complican bastante la vida de cara a entrar en las semifinales a tres jornadas para la conclusión.
Les ha costado, pero el de Zaratamo y su compañero empiezan a compactar y a ser una combinación más reconocible. Al delantero se le vio bastante más suelto en sus desplazamientos en los cuadros alegres y a la hora de mover la pelota. La compenetración de ambos también ha experimentado mejoría y el zaguero estuvo más cómodo y midiendo mejor los tiempos a la hora de golpear a la pelota.
Así complicaron desde el inicio la vida a los azules y se crecieron a medida que comprobaron que iban por el buen camino. Albisu no fue el de otras ocasiones. Los errores cometidos le pasaron excesiva factura psicológica y se le vio incómodo en numerosas fases de la contienda. Quiso buscar la última losa para evitar que Urrutikoetxea entrara en juego y la pelota terminó en la chapa o en el colchón de arriba. Su compañero estuvo bastante desactivado. Sus rivales pusieron el ritmo a la contienda y al navarro le tocó estar más pendiente de defender que de otra cosa. Mejoró algo sus números en las postrimerías del choque pero sufrió porque no tuvo el protagonismo que le gustaría.
Y eso que arrancó el choque con una buena volea a pared, pero el partido entró enseguida en una fase de errores por parte de los cuatro protagonistas que propició que el marcador se mantuviera ajustado y los tantos fueran más bien cortos. Una pelota a la chapa del guardaespaldas azul fue el inicio del fin para ellos. Los colorados consiguieron una tacada de nueve tantos tras asentarse mejor. El vizcaíno abrió bien ángulos, y su compañero arrimó la pelota atrás sin que sus rivales consiguieran parar lo que se les venía encima (15-5).
Con el horizonte despejado todo fue más fácil para Urrutikoetxea e Irribarria. Mantuvieron sus prestaciones y, poco más tarde, se colocaron a un tanto para la conclusión. Tuvieron que pelear algo más todavía por una cierta relajación y el acierto en el saque de Peio Etxeberria, pero el trabajo ya estaba hecho.
Por otra parte, Baiko Pilota informó ayer que Rubén Salaverri ha dado negativo en el test del Covid-19, pero el zaguero riojano deberá seguir el protocolo marcado. De forma transitoria no entrenará ni jugará partidos hasta que las autoridades sanitarias entiendan que resulta posible su regreso seguro a la actividad.
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