La pegada siempremarca la diferencia

Hasta que Rezusta calentó el suyo. El izquierdo, el bueno. Martija, que hasta ese momento se había defendido con solvencia –ágil de piernas llegó a un par de dejadas al txoko de Artola–, comenzó a sentir en sus carnes el látigo del bergararra. A Rezusta intentaron buscarle las cosquillas en el ancho, sin éxito. En la tres únicas ocasiones que tuvo que utilizar la derecha lo hizo a la perfección. Eso fue al principio. Después, ni se atrevieron a intentarlo más.

Peña II y Martija tuvieron la osadía de ponerse por delante en el marcador (3-5). No fue más que un espejismo. No tardaron Artola y Rezusta en poner las cosas en su sitio con una tacada de siete tantos consecutivos (10-5). Los cuatro estaban jugando bien hasta ese momento, hasta que Rezusta dijo basta. El zaguero de Bergara comenzó a soltarle con más ganas a la pelota. Se convirtió en un martillo pilón ante el que Martija, anclado entre los cuadros siete y ocho, bastante hacía con mantenerse en pie.

Las devoluciones del de Etxeberri, algunas de mucho mérito, llegaron francas a los dominios de Artola y el de Alegia se hinchó a rematar. Peña apenas podía oponer resistencia, pero nunca dejó de luchar. Trató de ayudar a su compañero restando de aire los saques de Artola hasta en catorce ocasiones, pero tampoco resultó como esperaba. Artola y Rezusta se fueron despegando poco a poco. Jugaron muy cómodos siempre con un colchón de tantos favorable (1-15, 13-8 y 14-9). Solo permitieron que sus rivales hicieran un tanto más. Una dejada al ancho del tolosarra desde el suelo. En el 13-9, Peña también hizo gala de su espíritu de lucha al responder con otra dejada a la punta, de forma acrobática, tras una violentísima volea de Artola.

Ahí se acabó la historia. Rezusta seguía campando a sus anchas y el alegiarra parecía tener ganas de volver cuanto antes a casa. Siete tantos consecutivos de todas las posturas, ganchos, paradas, dos paredes, voleas, pelotazos atrás y dejadas. Todo su repertorio de remates. Su pegada y, sobre todo la de Rezusta, marcaron la diferencia.