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Unai Laso y Ander Imaz vivieron una tarde plácida ayer en el Ogueta de Vitoria frente a Peña II y Albisu y se colaron en la liguilla de semifinales del Campeonato de Parejas. Corroboraron la diferencia existente entre ambos durante tres meses de competición con ... un 22-11 nítido, el segundo triunfo más cómodo de los nueve que han cosechado desde el 20 de noviembre. Ni siquiera necesitaron rayar a gran altura el de Bizkarreta y el de Oiartzun, ya que encontraron muchas facilidades en el camino. Peña II empezó con un fallo de volea (1-0) y terminó con un gancho a la chapa (22-10). En medio acumuló otros siete errores para totalizar nueve tantos perdidos, incluidos dos a la hora de devolver de aire los saques de Laso.
El inicio del tolosarra resultó desconcertante y entró en una dinámica negativa de la que no salió en ningún instante. Arrancó bien Albisu, seguro y dominador. Sin embargo, su delantero no le dejó hacer en la medida recomendable. Entró demasiado rápido y mal. Le ha sucedido a Peña II en varias ocasiones durante el presente campeonato. Le ha faltado quizá a Albisu dar un puñetazo en la mesa y mostrar galones dentro de la pareja, porque el ataundarra empezó el torneo con dudas, pero ahora mismo transmite la impresión de encontrarse bien. No ha sido suficiente para trasladarlo a los resultados.
Unai Laso volvió a exhibir el garrote de su brazo derecho, el que le ayuda a abrir huecos sobre la cancha. Cuando entra en acción tanto de sotamano como a bote, mete la cintura de maravilla y obliga al zaguero contrario, algo que en esta ocasión no consiguió la derecha de Peña en ningún momento. Cumplida esa premisa, toma el relevo la zurda del de Bizkarreta para culminar las ventajas fabricadas.
Si a Peña II y Albisu les ha faltado engrasar la pareja para que fluyera como hace doces meses, a Laso e Imaz les ha sucedido lo contrario. Cada uno ha manejado su parcela con solvencia en su estreno juntos. El oiartzuarra está entre los zagueros con menos fallos a lo largo del torneo. Es una garantía de esfuerzo y saber estar. Laso, además de defender y atacar dentro de su parcela, ha acudido en auxilio de su compañero con sentido común, sin excederse.
Ander Imaz confiesa que se ha encontrado bien en el campeonato «después de dos participaciones complicadas». Ha vuelto a ser un complemento adecuado para quien se ha reafirmado como principal valor de la empresa Baiko en las grandes competiciones. Subcampeón del Cuatro y medio navarro, ausente en el Masters CaixaBank por decisión empresarial, subcampeón del Cuatro y Medio oficial, y ahora único defensor, al lado de Imaz, del pabellón de la empresa vizcaína en la liguilla de semifinales.
La competencia de Aspe se presenta poderosa. Irribarria y Rezusta serán sus oponentes en la primera jornada, el sábado en el Labrit de Pamplona. En el horizonte aparecen Elezkano II-Zabaleta y Altuna III-Martija. Nadie discute que han sido las cuatro mejores parejas. Estos no se van a rendir.
Merece mención, asimismo, la pobre asistencia en el Ogueta de Vitoria, con poco más de 300 pelotazales. Las dimensiones del recinto gasteiztarra, con un aforo superior a 1.500, hacen imposible disimular tamaños espacios vacíos. Baiko y Aspe no han acertado en la elección de la sede.
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