Irribarria y Zabaleta, a la final del Parejas tras ganar en Bilbao

Son la combinación que partía como favorita desde el inicio y, a pesar de los contratiempos sufridos en la liguilla de cuartos, Irribarria y Zabaleta han llegado a las semifinales en plenitud de condiciones. Sobre todo el delantero de Arama. Hace un año que no jugaba una final y era el que más ganas tenía de hacerlo, y se le notó en la cancha de Miribilla. El delantero fue este domingo el pilar en el que se basó su triunfo. Aunque en un principio le costó algo más cruzar la pelota, cuando se asentó siempre dio un paso al frente y terminó con una docena de tantos en su haber. No solo eso. Puso el ritmo con su juego de aire y estuvo fino en defensa. Zabaleta ha tenido tardes más inspiradas, pero cumplió. El de Etxarren no soltó su pelotazo contundente más que en contadas ocasiones, pero tan solo perdió una pelota y estuvo atento a cubrir el 'txoko'.

Los colorados no hicieron un mal partido, pero tuvieron que hincar la rodilla ante el poderío mostrado por sus rivales. Aguantaron en el primer tercio de encuentro porque arriesgaron y las cosas les salieron, y porque los azules pecaron de enredarse en los cuadros alegres. Pero no pudieron contener a Irribarria y Zabaleta tras el empate a siete y el choque se rompió. Para contrarrestar la pegada tenían que ser muy regulares y hacer casi todas las cosas bien. Pero la exigencia de los azules no se lo permitió.

El choque arrancó con un ritmo vibrante y los cuatro protagonistas muy puestos. Ambos delanteros fueron valientes y dejaron su impronta en los primeros tantos. Hubo hasta cierta polémica al interpretar el juez que no hubo estorbo de Irribarria a Elezkano II en el quinto tanto del choque que cayó del lado del primero. Se quedó en anécdota porque la igualdad presidió los siguientes minutos con ambas parejas en plena refriega y sin conseguir despegarse en el luminoso. Hubo empates a 5,6 y 7, pero Irribarria y Zabaleta comenzaron a imponer la lógica a base de pelotazos. Un parcial de 2-11 fue suficiente para romper definitivamente el choque. El delantero de Arama se salió. Tuvo el gancho perfectamente engrasado y sacó mucho provecho a una volea que colocó a milímetros de la chapa en varias ocasiones.

En la última parte del encuentro fueron los colorados los que lo hicieron casi todo. Rezusta logró un par de tantos meritorios con una cortada de izquierda a pared y una dejada tirándose al suelo, pero perdió un par de bolas de las que no acostumbra. Elezkano II quiso arriesgar para tratar de acortar la diferencia porque no les quedaba otra, pero tampoco estuvo fino en sus acciones. Al finalizar el choque los cuatro protagonistas tuvieron que pasar el control antidoping.