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juan pablo martín
Viernes, 6 de noviembre 2020, 03:17
Ha sido uno de los mayores dolores de cabeza en los entrenamientos de los protagonistas del Manomanista, que arranca hoy en Ataun. La Liga de Empresas de Pelota a Mano (LEP.M) ha justificado la nueva medida de acortar el espacio para el saque y colocar la pasa en el cuadro seis y medio en favor del espectáculo, pero sus protagonistas tienen dudas sobre la eficacia que tendrá ahora la jugada inicial.
Es un arma muy peligrosa sobre todo en las luchas individuales por la ventajas que concede. No solo para conseguir tanto con ella, sino también para que el sacador tenga el viento a favor en la siguiente acción porque un resto flojo le permite disponer de otra oportunidad por los huecos con los que cuenta. Ahora el espacio será menor para poner la pelota entre las dos rayas y tendrá al rival más cerca del frontis. Todo se estrecha.
Y el debate está abierto. Hay quienes piensan que favorece de forma clara al restador como Irribarria, «y perjudica al que ha hecho el tanto. Si quieres ganar vas a tener que sacar más, y va a resultar más complicado. Se hará mucho menos daño», destaca. Acostumbrados como estaban a retrasar la pelota lo máximo posible, los manistas se enfrentan al temor de pasarse, por lo que tendrán que buscar menos altura en el frontis o imprimir menos velocidad a la pelota para no superar el límite. Para Elezkano II el cambio «no es beneficioso ni perjudicial para nadie. Si las empresas han decidido que es bueno para el espectáculo, adelante. A ver si aciertan». Reconoce que para los especialistas con esta jugada la nueva medida «les puede generar más dudas. Pero yo tengo una única forma y voy a seguir con ella», añadió.
Urrutikoetxea admite que «va a resultar más complicado» hacer daño con la jugada inicial porque en el caso de no acertar a colocar el cuero donde se quiera, «como la pasa está más cerca puedes dejar pelota a placer al contrario». Una de las alternativas será buscar un golpe más cortado a pared y con mayor velocidad para dificultar la labor del restador. «Hay que golpear más de costado en lugar de meter la mano por abajo, pero se podrá hacer mucho daño todavía porque como la pelota va más rápido la capacidad de reacción del rival también es menor. Tenemos que acostumbrarnos», subraya Ezkurdia.
Las novedades en un deporte tan tradicional generan ciertas incertidumbres. «Pero serán para todos, por lo que la clave estará en acertar a poner la pelota donde quieres», recalca Altuna III. Las incógnitas comenzarán a despejarse hoy en Ataun.
El festival de Ataun de esta tarde (19.30 horas) con el que arrancará el Manomanista será el último con público de la pelota tras la medida decretada ayer por el Gobierno vasco. Era un escenario que las empresas no quisieron contemplar en la presentación pero que ha llegado. Hoy Zubizarreta se mide a Darío por una plaza en cuartos.
En los frontones de Amurrio y Eibar, sedes para el sábado y domingo, no habrá público y la Liga de Empresas de Pelota a Mano (LEP.M) devolverá el dinero a los aficionados que ya habían sacado su entrada.
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