Los favoritos estarán en la final del Masters en el Navarra Arena

Cada una con sus armas, pero ambas parejas cumplieron los pronósticos y jugarán ¡el domingo la final del Masters CaixaBank, el último gran torneo de la temporada en el frontón del espacio multiusos Navarra Arena. Ezkurdia y Mariezkurrena II superaron (22-7) a Jaka y Zabaleta en un duelo que tuvieron controlado en todo momento, mientras que Altuna III e Imaz tuvieron que sufrir bastante más para imponerse (22-15) a Irribarria y Albisu.

En el primero del festival, que reunió a cerca de 1.500 espectadores, los colorados prolongaron el momento dulce que han exhibido a lo largo de todo el verano y no tuvieron problemas para deshacerse de unos rivales que casi nunca estuvieron cómodos sobre una cancha exigente. Sobre todo Jaka. Al de Lizartza le costó cogerle la medida y no estuvo fino en el remate.

En los cuadros largos las fuerzas estuvieron algo más niveladas, pero el zaguero de Berriozar terminó por imponer su ley. Gozó mucha pelota y consiguió abrir más huecos para su compañero. Ezkurdia comenzó con algún problema con la volea lo que le impidió poner el ritmo que le gustaría, pero lo suplió con su acierto con el gancho.

A pesar de la diferencia final que registró el marcador, el encuentro comenzó bastante peloteado. Los tantos fueron largos, aunque casi siempre cayeron del mismo lado. Los navarros tomaron pronto una ventaja cómoda que les permitió seguir centrados, mientras que sus rivales buscaron pero no encontraron la fórmula para agarrarse al choque. En el ecuador la ventaja de los ganadores fue de ocho tantos (11-3), y en la segunda parte les bastó con mantener las prestaciones para tener la situación controlada. El de Arbizu consiguió meter mejor la pelota en la mano y su volea comenzó a hacer daño, mientras que atrás Mariezkurrena II siguió a lo suyo. Será la sexta final que juegue en los últimos meses. El partido se cerró tras 568 pelotazos y 55 minutos de juego.

Altuna III e Imaz tuvieron que trabajar mucho más para conseguir su billete. Sabían lo que les esperaba ante dos pegadores como Irribarria y Albisu, y tuvieron la paciencia suficiente para madurar el choque y a sus rivales (22-15). Y eso que los azules comenzaron muy sólidos y llegaron a contar con ventajas de cinco tantos. Pero en la segunda parte se vinieron abajo.

El de Arama y el de Ataun saltaron a la cancha con la clara idea de desactivar a Altuna III y cargar el juego atrás. Y los consiguieron. Llevaron la iniciativa y el de Arama estuvo valiente en el remate. Incluso apostó por algunos ganchos, un golpe que ha tenido bastante olvidado este verano. Se le escaparon un par de remates a la chapa, pero se trabajó lo tantos. En la primera parte de la contienda Altuna III casi no tocó pelota. Y cuando lo hizo fue para defender y ayudar a su compañero. De hecho, solo consiguió un tanto.

La diferencia en el juego no se plasmó en el marcador por la capacidad de resistencia de los colorados, que reaccionaron a partir del 8-13. Con el material sin tanta chispa, el de Amezketa comenzó a ganar protagonismo y la remontada fue una realidad. Bajó la pelota, enredó en los cuadros alegres y cambió la dinámica al encuentro. Estuvo en su salsa después de muchos minutos y ya no pudieron pararle. Fue un duro golpe para Irribarria y Albisu. Después de tener la situación controlada durante muchos minutos, el choque se les escurrió entre los dedos. Con un parcial de 12-2 los colorados se fueron directos al cartón 22 tras poco más de una hora de juego y 569 pelotazos.

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