Elordi y Rezusta dicen adiós al Parejas

Elordi y Rezusta se despidieron del Parejas con un abrazo en el frontón de Amorebieta. Mantuvieron la esperanza hasta su primer partido del play-off, pero los de Aspe tuvieron que rendirse a la evidencia. Su falta de confianza les volvió a pasar factura y lo pagaron con una derrota contra Peña II y Albisu. Los que vistieron de azul se ganaron el derecho a soñar con estar en las semifinales porque este domingo (17.00 horas) tendrán la oportunidad de sacar el billete contra Artola e Imaz en el frontón Bizkaia. Cuentan con poco más de un día de descanso, pero la exigencia del choque de este viernes tampoco fue tanta.

Había mucho en juego y estaba por ver cuál de las dos combinaciones, bastante irregulares a lo largo de todo el torneo, era capaz de ofrecer su versión mas reconocible. El de Tolosa y, sobre todo el de Ataun, estuvieron bastante más consistentes y esa fue la clave de que no tuvieran muchos problemas para hacerse con el triunfo. El delantero imprimió velocidad a la pelota e hizo daño con el saque, mientras que su compañero dominó su parcela y falló poco.

Elordi y Rezusta no compactaron. El de Mallabia comenzó agresivo pero las cosas no le salieron, y el de Bergara emitió excesivas dudas. No estuvo cómodo más que en momentos puntuales de la contienda, y sufrió bastante con la pelotas que venían tocadas. Aguantaron hasta el mitad el partido, pero se vinieron abajo en la segunda parte.

El choque comenzó con numerosos errores por ambos lados que pusieron en evidencia la tensión reinante sobre la cancha por lo que había en juego. Y fueron los guipuzcoanos los que lograron templar mejor los nervios para adelantarse en el luminoso ante unos rivales a los que les costó mucho tomarle la medida al encuentro. Rezusta no pudo gozar la pelota y dio síntomas de inestabilidad desde el primer momento, por lo que el vizcaíno no tuvo protagonismo. Entró forzado al remate y hasta el 4-8 no sumó su primer tanto.

Pero todavía quedaba mucho y los colorados insistieron. Elordi amagó bastantes veces para dejarle pelota servida a su zaguero e intentar que recuperara la confianza, pero el de Bergara le costó mucho ver la luz.

Los mejores momentos de los derrotados llegaron entonces. Elordi afiló su gancho y su guardaespaldas parecía que se asentaba. De esta forma se colocaron a uno (11-12). Pero fue un espejismo porque no lograron mantener sus prestaciones y sus rivales se crecieron a medida que vieron dudar a sus oponentes. Los de Baiko lograron una tacada de ocho tantos en la que se pudo ver el lado mas vulnerable de los azules que los dio alas. Luego les bastó con mantener la cabeza fría para contener el último intento de reacción de los de Aspe para llevarse la victoria.

Artola e Imaz les esperan en el Bizkaia en un duelo en el que el delantero de Alegia se volverá a vestir de blanco tras superar una gastroenteritis aguda salvo sorpresa de última hora.

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