«No creo que este sea el mejor Laso»

«Tuve partido el sábado y me he entrenado muy poco», apunta. «Necesito descansar y estar fresco para el sábado. Esta semana haré muy poco. Me encuentro bien. Llevo una buena racha. Desde hace un tiempo mantengo las mismas rutinas y costumbres y me va bien». Antes de elegir material ensayó ayer en compañía de Aimar Olaizola, director deportivo de Baiko, quien le ayudó provisto de una raqueta.

«La semifinal es para mí un premio», confiesa el de Bizkarreta. «Al principio del campeonato, el objetivo era volver al nivel que tenía antes. La cadera me ha respondido, estoy bien físicamente y me siento a gusto mentalmente. Lo pasé mal después de la lesión. Tuve partidos muy malos en el Campeonato de Parejas. Me dolía incluso al andar».

El transcurso de las semanas ha jugado a su favor. Preguntado sobre las razones de la diferencia entre el Laso del Parejas y el actual, la respuesta apunta en una dirección: «He ganado tiempo de recuperación. Todas las semanas acudo a los fisioterapeutas. Aunque todavía no estoy al cien por cien y no he recuperado toda la movilidad de la zona de la cadera, ahora puedo mejorar el rendimiento de los entrenamientos. Antes, al no tenerla bien del todo, era más complicado progresar. Una lesión tiene plazos».

Si bien su rendimiento le ha permitido imponerse con resultados holgados a Bakaikoa, Altuna III, Darío y Zabaleta, el de Bizkarreta es cauto. «No creo que este sea el mejor Unai Laso. Me veo margen. Hay ocasiones durante los partidos en las que apoyo mal los pies, voy un poco más tarde. Siempre hay cosas por mejorar. Estoy contento porque me veo a buen nivel, pero puedo progresar todavía».

De sus afirmaciones se deduce que este Laso no ha alcanzado todavía el nivel del que ganó la txapela en 2022. Preguntado por esta cuestión, Laso modifica el discurso: «No diría que este Laso sea mejor o peor que el de hace dos años. Es distinto. Cada momento es diferente. Estoy bien, pero nunca se sabe si mejor o peor. Eso es cuestión de los periodistas. Yo no pienso en eso. Me centro en jugar bien. Si trabajas bien durante la semana, vas relajado a los partidos».

Unai Laso considera que se le otorga el papel de favorito «por los partidos que he ganado y por la veteranía. Seguro que Zabala viene con mucha ilusión a la semifinal. Yo mismo he vivido esos momentos. Te sientes con toda la confianza del mundo. Será un rival peligroso. Ha demostrado que juega una barbaridad, que puede sacarte a pelotazos. Intentaré aguantarle y hacer mi juego».

Quiere evitar las sobredosis de confianza. «Si yo hago bien mi trabajo, tengo muchas posibilidades, como en los partidos anteriores. Pero soy consciente de que Javier también va a jugar. Será un rival muy duro y peligroso. Saca bien y la pone lejos con las dos manos. Pienso que su objetivo será tenerme muy atrás. Y el mío, parecido. Ambos somos pegadores. Quizá él tiene un poco más de toque que yo». El saque le ha funcionado bien a Laso hasta el momento: «Lo he entrenado mucho y estoy contento con esa faceta del juego. Antes quizá iba a poner la pelota y ahora busco el tanto. Botar bien ayuda. Sacar bien será la clave. Pero cada partido es distinto».

La final está cerca y lejos a la vez. «De momento no pienso en la final. El premio es el mismo para ambos. ¿La otra semifinal? Está muy abierta. No puedo dar un favorito. Artola está arrasando a todos, pero a un partido puede suceder cualquier cosa. Jokin es Jokin. Se crece en los momentos grandes. Creo que volverá a hacerlo. Presumo un partido igualado. A ver si sale bueno, que es lo importante».