Aitor Elordi: "Sé lo que cuesta llegar, y que como te descuides puedes caer rápido"

– Más que el disgusto fue una pena. Estuve a un paso tras firmar una liguilla de cuartos bastante mejor de lo que pensaba, y a pesar de tener un rival grande como Altuna III en semifinales veía que tenía opciones. No pudo ser y hay que tener los pies en el suelo.

– Cuando terminó el partido se quedó un momento con las manos apoyadas y mirando a la pared izquierda. ¿Qué le rondó en la cabeza?

– Estaba fuera tras la derrota y tenía que gestionar las numerosas emociones y sentimientos vividos durante el choque. En poco tiempo pasé de estar arriba a estar abajo. Hay que tratar de darle la vuelta a la situación lo antes posible y sacar las conclusiones positivas para aprender de cara al futuro.

– Pasados unos días, ¿ve con otra perspectiva el encuentro?

– No queda otra. No te puedes quedar metido en el agujero dando vueltas a lo ocurrido porque no avanzas. Podía pasar. Esta vez me tocó perder a mí. Estoy con ganas de seguir trabajando y entrenando.

– Ha cumplido con creces el objetivo que se marcó al inicio de la competición.

– Vistos los partidos que jugué al final del verano no pensaba que en el campeonato podría estar a este nivel. Por eso al principio me propuse conseguir como mínimo lo del año pasado y si podía dar un pasito más, mejor. Ganar a Jaka fue algo grande. Empecé la liguilla sin nada que perder. Estaba bien desde el punto de vista físico, pero aunque prepares a conciencia un duelo te tiene que acompañar todo. Las manos, los pequeños detalles tienen que caer de tu lado... Y todo fue rodado. Ahora, ya en frío, hubiera firmado lo que he conseguido al comienzo del torneo.

– ¿Se cree ya que puede tutear a los mejores de esta distancia?

– He comprobado que tengo capacidad para enfrentarme a ellos, pero igual necesito trabajar otros aspectos como el psicológico para preparar mejor los partidos. Pero visto el grupo de la liguilla que tenía y si he podido ganar a todos no ha sido cuestión de suerte.

– El trabajo que ha realizado desde que debutó hace seis años está dando sus frutos.

– Para llegar hasta aquí he tenido que trabajar mucho y me ha tocado pasar por muchas situaciones. Sé lo que cuesta llegar, pero eso no significa que ya esté todo hecho. Hay que seguir demostrándolo día a día. Si te descuidas puedes caer rápido.

– Lo difícil es mantenerse.

– Lo vi claro desde que debuté porque me ha costado mucho estar ahí. Y esta frase también me vale para la situación actual. Lo tengo bien aprendido.

– El domingo se juega la tercera plaza. ¿Es un bonito premio?

– Muy bonito para los dos. Sería un gran logro y el mejor modo de poner un buen broche al campeonato. Será complicado porque el choque tendrá tanta tensión como los que he disputado hasta el momento, pero espero que las cosas me salgan bien.

– Peio Etxeberria es un rival que también ha crecido a lo largo de los dos últimos años.

– Es muy peligroso porque ataca bien la pelota con ambas manos y puede ganar a cualquiera. Necesito firmar un partido muy serio y dar el nivel que he mostrado hasta ahora si le quiero ganar.

– Si lo hace, también será el suplente de la final.

– Sería una pena que se lesionara cualquiera de los dos protagonistas. No hay que pensar en eso. La victoria serviría para aparecer con ellos en la foto del podio.

– ¿Sale reforzado tras este campeonato?

– Si después del trabajo que realizas no llegan los resultados, a medida que pasa el tiempo puedes perder motivación y que se te haga duro el día a día. No es fácil. Cuando llegan este tipo de momentos preciosos y ves los frutos es como un chute de energía. Veo el sentido a la labor diaria y creo que estoy en el buen camino.

– La pelota vizcaína necesita más referentes.

– Cada año las cosas cambian. Este año he sido yo el pelotari que ha dado la sorpresa, pero hay figuras como Urrutikoetxea y Elezkano II que pueden hacerlo en cualquier momento.

– El Campeonato de Parejas está a la vuelta de la esquina. ¿Se ve con alguna opción de entrar?

– Alguna opción creo que tengo. El buen torneo que he realizado me da una pequeña esperanza de que puedo estar en la pelea. Me haría muchísima ilusión porque sería el mejor modo de mantener la progresión. Creo que hasta ahora he hecho bien las cosas, pero habrá que esperar.

– La competencia es grande.

– Muy grande. Pero eso también es bueno porque teniendo esos compañeros mejoramos todos. La decisión tampoco es fácil para la empresa.