Urdaibai pone la primera piedra en Zarautz

El santuario del surf nunca defrauda. Zarautz es sinónimo de empopadas interminables que hacen imposible vislumbrar cuál será el desenlace si las diferencias no son escandalosas. Este sábado, en una primera jornada que tuvo mucha miga con amenaza de galerna incluida, volvió a deparar una regata de altos vuelos que se decantó finalmente del lado de Urdaibai en un último largo de poder a poder en el que tanto la 'Bou Bizkaia' como Donostiarra, a la postre segunda, jugaron sus cartas con nobleza y se citaron de nuevo para este domingo.

Los 'txos', que sumaron así su duodécima victoria de la temporada y se quedan a dos de batir el récord de triunfos una misma campaña en poder de Castro y Hondarribia (13), afrontarán el segundo y definitivo asalto (11.25 horas) con cuatro segundos y 88 centésimas de ventaja sobre la 'Torrekua II'. No es ni mucho menos una diferencia para confiarse teniendo en cuenta además que las previsiones anuncian olas de metro y medio y viento del noroeste con rachas por encima de los 20 kilómetros por hora que pueden ser determinantes.

Sin embargo, todos quisieran estar en la posición de los hombres de Iker Zabala después de haber remado además por una calle, la cuatro, que claramente era la peor del día. Donostiarra consiguió poner a los azules contra las cuerdas durante muchas fases de la regata, pero los patroneados por Gorka Aranberri, que conoce el campo zarauztarra como la palma de su mano, tuvieron la calma necesaria para sobrellevar los malos momentos y resolver cuando tocaba.

El primero en iniciar las hostilidades fue una valiente Zierbena, que aprovechando que por las balizas interiores -remó por la dos- se salía mejor, realizó la primera ciaboga con un segundo de ventaja sobre los 'txos'. Donostiarra y Hondarribia cediendo seis y ocho segundos en ese punto. Sin embargo, nada más dar el giro, comenzó lo bueno. Las diferencias entre el cuarteto crecían y menguaban a golpe de empopada y se plantaron a mitad de regata en un estrecho margen de cinco segundos. Precisamente en ese punto, los 'galipos' vieron cómo se truncaban sus ilusiones de victoria.

Los de Dani Pérez, que eran cabeza de regata, entraron lanzados sobre una ola a la baliza y el tres de babor, Alexandu Tacu, intentó ciar para ayudar al patrón a que no se fuera demasiado el bote. En esa maniobra rompió el remo. Rápidamente cogió el de repuesto que llevan en la embarcación, pero desgraciadamente también esa pala quebró poco después. Adiós al sueño. Conforme avanzó el tercer largo, Donostiarra y Urdaibai fueron ampliando el hueco sobre 'galipos' y hondarribitarras y encararon el última largo a la par.

La 'Torrekua II' cazó la primera ola a la salida de la baliza y logró un bote de ventaja que parecía otorgarle cierta ventaja en el juego. Pero Urdaibai no es de los que arruga ante la adversidad. Aranberri se echó ligeramente a estribor para escapar de la calle cuatro y cazó una par de olas que colocaron a los 'txos' de nuevo a la par. El juez de mar mandó a babor a los bermeotarras para evitar males mayores.

Y, con ambos botes en el límite de su calle a 750 metros de meta, el patrón de Urdaibai se subió a una ola que le catapultó hacia el triunfo dejando a Donostiarra con la miel en los labios. Los dirigidos por Igor Makazaga, que en el último mes han dado un importante paso al frente, lograron poner en serios apuros a la 'Bou Bizkaia' pero el líder de la Eusko Label Liga demostró una vez más disponer de recursos para salir airoso de las escaramuzas que le plantean .

La tercera plaza fue finalmente para Hondarribia por delante de Zierbena, a doce y quince segundos de la cabeza. Este cuarteto volverá a disputar hoy la tanda de honor. En la segunda remarán Getaria, Orio, Ondarroa y Kaiku. La 'Esperantza', que tuvo como rivales ayer a 'aguiluchos', ondarrutarras y lekeitiarras, se hizo con el triunfo parcial de su serie gracias a un gran segundo largo. En pleno mano a mano con los amarillos, Unax Eizagirre cabalgó una ola interminable a 500 metros del segundo giro con la que abrió un hueco de diez segundos que luego supo gestionar, pese a la reacción oriotarra. Kaiku, por su parte, no encontró oposición en la manga inaugural.

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