Sudáfrica celebra su cuarto Mundial

Sudáfrica salió bastante mejor en la gran final ante una selección de Nueva Zelanda que se sintió incómoda y sin posesión, además de jugar bastantes minutos en inferioridad con las sanciones de Frizell y del capitán Sam Cane, a quien el árbitro Wayne Barnes le enseñó la tarjeta roja por un placaje peligroso pasada la media hora, por lo que los 'all blacks' jugaron el resto del encuentro con 14 jugadores.

Todos los puntos de una primera mitad muy táctica, saldada con 6-12 para los 'springboks', fueron obtenidos con lanzamientos a palos: cuatro del sudafricano Handré Pollard y dos del neozelandés Richie Mo'unga.

La emoción aumentó tras el descanso. Rozó el ensayo Sudáfrica con Kurt-Lee Arendse y lo consiguió Aaron Smith para los 'all blacks' tras una enorme acción de Mo'unga, aunque fue anulado por un 'avant' previo cuando los dos equipos estaban con 14 por el 'sin bin' de Siya Kolisi. Sí subió al marcador poco después el de Beauden Barrett, único de la final, para colocar el ajustado 11-12, lo que significó también el primero que encajaba Sudáfrica en sus cuatro finales.

Nueva Zelanda se empleó algo más vertical en este periodo en un enfrentamiento que pudo ganar cualquiera. Los dos equipos jugaron con uno menos a partir de ahí tras la sanción a Cheslin Kolbe, justo cuando Jordie Barrett erró un golpe de castigo que pudo adelantar a los 'all blacks', que habían salido como favoritos en las apuestas. Pero Sudáfrica, cada vez que había jugado una final, la había ganado -en 1995, 2007 y 2019-. También en 2023 ante unos 'all blacks' que lloraron su apretada derrota.

Ha sido el Mundial en el que faltó España, a pesar de que se había clasificado tras ganar en la fase clasificatoria a Portugal. Pero fue sancionada por la alineación indebida de Gavin Van den Berg. Portugal, gracias a esto, sí participó y disfrutó mucho hasta obtener la primera victoria mundialista al vencer a la sorprendente Fiji en la fase de grupos por 24-23.

Todo comenzó el 8 de septiembre -ha sido un torneo de casi dos meses- con el triunfo de la anfitriona Francia ante Nueva Zelanda por 27-13 en Saint-Denis. Desde entonces, se han jugado 48 partidos en los que se han producido palizas que cuestionan de algún modo el actual formato. El duelo de hemisferios se ha resuelto, una vez más, a favor del sur en este décimo Mundial. Salvo en 2003, han brillado en lo más alto las selecciones de esta parte del planeta (Sudáfrica -4 títulos-, Nueva Zelanda -3-, y Australia -2-). Solo Inglaterra hace dos décadas, con el recordado drop de Jonny Wilkinson en la prórroga en Sydney ante Australia, ha permitido un éxito de las selecciones del hemisferio norte.