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julen ensunza
Domingo, 8 de agosto 2021, 14:36
A Santurtzi los aires gallegos le sientan de maravilla. Como en casa. Quizá tenga algo que ver el hecho de que cinco de sus remeros –Nando Rúa, David Iglesias, Diego Hermo, Javier Sayans y Óscar Viudez– son de aquella comunidad y ejercen como cicerones para ... saber a qué atenerse, pero lo cierto es que cada vez que la 'Sotera' navega por aquellas traicioneras aguas vuelve a la Margen Izquierda con la bodega llena y no precisamente de mejillones y marisco. Pesca banderas y puntos que ponen un poco más a tiro la corona CaixaBank.
La pasada campaña cosechó dos bandeiras como las denominan por aquellos lares –A Coruña y Boiro– y un segundo puesto –Ares– en las dos incursiones realizadas por la Eusko Label Liga y, tras su triunfo ayer en Boiro sobre Hondarribia, ya ha igualado esa cifra. Tendrá la oportunidad incluso de mejorarla, porque este verano la máxima competición arraunlari acude tres veces a Galicia. ¿Lo conseguirá?
Todo es posible, pero hasta entonces lo cierto es que el fin de semana de la 'Sotera' en la ría de Arousa ha sido para enmarcar. Un segundo puesto el sábado por escasas 56 centésimas sobre Donostiarra en un escenario nuevo para todos y una ajustada pero a la vez autoritaria victoria en la jornada dominical que certifica su gran estado de forma en la antesala de la Ikurriña de Zarautz, una de las citas por excelencia del calendario.
Y no solo eso. El botín cosechado en este viaje a los desconocido ha sido aún mayor. Porque, los morados desembarcaron en Rianxo con cinco puntos de ventaja sobre Hondarribia y abandonan la ría de Arousa con nada menos que nueve de diferencia respecto a los fronterizos y la confianza por las nubes.
Santurtzi, que tuvo como rivales en la tercera tanda a Donostiarra, Zierbena y Urdaibai, arrancó con el tiempo marcado por la 'Ama Guadalupekoa' en la serie anterior muy presente. Entre ceja y ceja. El temor a que la corriente –la marea estaba subiendo y el coeficiente era alto– jugase en su contra, dado que el viento esta vez no fue protagonista, era una posibilidad real que había que tener muy en cuenta e intentar gestionar lo mejor posible. Y los de Iker Zabala dejaron claro que, además de estar en un gran momento, también manejan con solvencia esas situaciones de regata.
La 'Torrekua' por la calle tres, a priori más favorable que la que le tocó en suerte a los santurtziarras –la uno– plantó cara a los patroneados por Gorka Aranberri hasta la tercera ciaboga –un bote entre ambos–. El hecho de que Zierbena quedase rezagada relativamente pronto por la baliza dos favoreció los intereses santurtziarras a la hora de manejarse eludiendo las trampas de su calle –Lekittarra y Cabo Cruz habían sufrido mucho por allí en las dos mangas anteriores–.
Con la tanda más o menos bajo era el momento de centrarse en el 19.23.56 de Hondarribia. La 'Sotera', con un único cambio en las tostas respecto a la víspera, calcó el registro de los verdes en la maniobra final (14.40) y estaba claro que debía apretar de lo lindo porque los fronterizos habían realizado un buen último tramo acuciados por una combativa Orio. Aranberri tuvo conocimiento de la situación a través del pinganillo y a la orden de su técnico, Iker Zabala, mandó zafarrancho de combate a la tropa. La cuadrilla morada puso su motor a pleno rendimiento y, a falta de 900 metros para meta, el GPS ya les situaba dos segundos por delante de los de Mikel Orbañanos.
La renta se mantuvo inalterable con la 'Sotera' navegando imperial por el centro del campo de regatas intentando aprovechar la corriente a favor. A falta de un minuto para la llegada, con la diferencia estabilizada, el patrón santurtziarra alentó a los suyos anunciando la buena nueva. «Bandera chavales». La Eusko Label, a falta de ocho jornadas por disputarse, comienza a coger cierta tonalidad morada.
Eso por arriba, mientras que por abajo Zarautz tiene cada vez más complicada la salvación. A la 'Enbata', colista, le restan seis finales para intentar escapar de la quema, pero los diez puntos de desventaja sobre Tirán parecen una losa demasiado pesada. Lekittarra, aunque se vio superada de nuevo por los de Moaña, ha logrado salvar un fin de semana muy complicado tras el confinamiento por los positivos por covid. Los de Osertz Alday mantienen un colchón de siete puntos respecto al play-off de permanencia.
La felicidad era máxima entre los integrantes de la tripulación de Santurtzi, pero uno de los que más contento estaba era Javier Sayans. Lógico. El de Boiro remaba en casa y «tenía marcada en rojo esta jornada», reconoció nada más desembarcar. «Hemos hecho una buena salida y al vernos en cabeza hemos ido más tranquilos y completado una buena regata. Ampliamos en un punto la ventaja sobre Hondarribia y nos vamos contentos para casa», enfatizó. El patrón de los fronterizos, Joseba Amunarriz, por su parte, prefirió mirar al futuro y apuntó que «queda mucha liga todavía».
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