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José Andrés le puso una mácula al día en que Donald Trump rubricó uno de los pocos éxitos rotundos de su presidencia. El mandatario saboreaba aún la muerte de Abu Baker al-Baghdadi, líder del Estado Islámico, en una operación en el noroeste de ... Siria cuando acudió el domingo al Nationals Park de Washington para contemplar el quinto partido de las Series Mundiales de béisbol que enfrentan a los Washington Nationals con los Houston Astros. Pero allí se topó con el escarnio del público, que saludó su presencia en una de las suits del recinto al grito de «¡Enciérrenlo!» -en alusión al 'impeachment' puesto en marcha por los demócratas- mientras aclamaba por el contrario al cocinero español, furibundo detractor de la política migratoria del magnate y encargado de efectuar el lanzamiento inicial de un encuentro que terminó con victoria de los texanos por 7-1.
Rob Manfred, comisionado de la Major League Baseball (MLB), le había mencionado a Trump la posibilidad de hacer ese lanzamiento inicial. «No lo sé. Tienen que vestirme con una gran armadura pesada. Me veré muy pesado. No me gusta eso», titubeó el republicano, que practicó el béisbol cuando estudiaba en la Academia Militar de Nueva York y es devoto de los Yankees. Sabía que la idea no contaba con muchas simpatías. El distrito de Columbia, donde apenas obtuvo un 4% de los votos en las elecciones de 2016, es territorio hostil y los Nationals no querían verle en el montículo. «Los primeros lanzamientos los decidimos nosotros y sentimos que había muchos otros candidatos a considerar antes», aclaró Mark Lerner, propietario de la franquicia.
La elección final fue una bofetada en toda regla al mandatario. El honor recayó en José Andrés, con el que el multimillonario mantuvo un largo pleito cuando el cocinero español rompió el acuerdo que tenía con él para abrir un restaurante en su hotel de Washington después de que éste calificase de «criminales» y «violadores» a los inmigrantes mexicanos. El litigio se cerró con un pacto entre las partes pero ni mucho menos resolvió sus diferencias.
El chef asturiano, una eminencia en Estados Unidos, siguió clamando contra sus políticas y el pasado mes de enero organizó unos comedores de campaña para alimentar a miles de empleados federales que se quedaron sin trabajo durante el cierre gubernamental motivado por el desencuentro entre los demócratas y Trump a cuenta del muro en la frontera con México. Entonces tres centenares de restaurantes de 35 Estados se sumaron a la iniciativa solidaria, echando leña al fuego en la larga lista de desencuentros entre el genio de los fogones y el empresario reconvertido en político.
Por ello, a Trump no le hizo ni pizca de gracia que José Andrés fuese el designado para abrir el partido entre los Nationals y los Astros. Pero el veredicto de la grada fue claro, 'eliminando' al mandatario con sus abucheos antes de la cuarta entrada de un partido en el que el chef se dio un baño de masas.
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