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Peru Olazabal
Bilbao
Viernes, 8 de marzo 2024, 20:14
'El Rey de la Tarima' vuelve a su casa cuatro años después. Esa canción, la que introduce al talentoso Jon Fernández, volverá a sonar la noche del sábado en el Frontón Bizkaia. El púgil de Etxebarri no ha tenido ningún problema para llegar al peso pactado y está listo para afrontar el reto de pelear contra un campeón mundial como Jezreel Corrales. «Encima del ring somos dos boxeadores, he hecho guantes con gente que actualmente es campeona del mundo y sé que estoy a ese nivel muy de sobra. Para ser campeón del mundo, te tiene que llegar la oportunidad, solo necesitamos la oportunidad para demostrarlo», señala a EL CORREO un convincente 'Jonfer' después de subirse a la báscula.
El vizcaíno quiere estar entre los mejores del mundo y sabe que la única manera de hacerlo es enfrentarse a grandes rivales. Vencer al panameño le podría elevar en importantes rankings de su peso, aunque ahora no mira más allá. Está únicamente enfocado en esta pelea. «Lo único que sé es que al acabar la pelea me voy a ir con toda mi gente a cenar después, hay que disfrutar del momento, una cosa en las que he madurado en este tiempo es eso, me centro en esta pelea y luego ya veremos», comenta. El boxeador de 28 años ha experimentado desde hace un tiempo hasta ahora un gran crecimiento en el aspecto psicológico. «Mi mayor cambio es a nivel mental, eso cambia todo lo demás, todos los cambios están dentro de uno mismo», asevera.
Aún así, dice conservar «su esencia». Sigue siendo un boxeador técnico, agresivo, que nunca rehúye al intercambio de golpes y que ofrece un gran espectáculo. Además, se ha preparado de la mejor manera. Ha realizado su campaña en Las Vegas junto al prestigioso Ismael Salas, lo que le permite «mucho foco en lo que toca ahora, que es boxear, estoy alejado de todo lo demás y eso hace que invierta todo el tiempo a ello». 'Jonfer' es uno de esos boxeadores que intimida a sus rivales. Para esta velada se le han caído dos, hasta que encontraron el premio gordo de poder enfrentarse a Jezreel Corrales, un púgil zurdo. Algo que al de Etxebarri no le supone ningún problema. «El anterior rival también era zurdo, he peleado muchas veces con zurdos y no se me dan mal», indica. Su pronóstico es que «terminará antes del límite y será una bonita pelea».
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