Hondarribia se alía con el viento para ganar en Orio

Y en este caso, a la vista de la celebración de los remeros de la 'Ama Guadalupekoa', que esperaban impacientes el desenlace final en las inmediaciones de meta, es maná caído del cielo para alimentar sus deseos de volver a ser competitivos y regulares. En resumen, para limpiar la mente y creer en sus posibilidades, aunque «sabemos que nos ha ayudado el viento», apuntó Orbañanos. La locura desatada en las tostas fronterizas, contrastaba con la decepción de una Zierbena a la que Eolo truncó sus ilusiones de descorchar la botella de champán por tercera vez este verano. Eso y, según su patrón Aitor Lazkano, también porque la zodiac de la organización les perjudicó durante la regata.

«Al que va delante, extrañamente se le mete la embarcación de los jueces delante. Solo nos preocupamos de joder a los más fuertes», lanzó muy molesto el dueño este domingo del remo de gobierno 'galipo'. Los de Dani Pérez, dominadores de la serie de los 'gallos' por delante de Urdaibai, tuvieron que conformarse finalmente con la segunda plaza de la jornada, a poco más de cuatro segundos de los verdes. No fueron los únicos que salieron descompuestos este domingo.

Urdaibai también vivió una jornada negra desde el punto de vista clasificatoria. Los 'txos', con cuatro cambios respecto al sábado y variaciones de puestos como la presencia de 'Tabero' como marca de babor por primera vez este curso, cosechó su peor resultado del curso hasta el momento. Cayó a la quinta plaza superada también por Getaria y Lekittarra, botes que remaron en la segunda serie junto a Hondarribia. El contratiempo no tuvo daños colaterales para los bermeotarras. Se mantienen al frente de la Eusko label Liga con diez puntos de colchón sobre Zierbena, pero el resultado escuece.

Pocos imaginaban que, a la vista de cómo se había desarrollado su serie, los fronterizos iban a llevarse la bandera. Es cierto que los de Orbañanos dominaron de principio a fin a Getaria, Lekittarra y Cabo Cruz y que bajaron de los 21 minutos, a la postre fueron los únicos –un buen crono a la vista de las condiciones de la mar–, pero su segunda mitad de regata no había sido buena. Getaria, de hecho, consiguió recortarles parte de la desventaja.

Sin embargo, los astros se pusieron de cara para ellos. La salida de Urdaibai, Orio, Zierbena y Donostiarra se demoró más de la cuenta, entre otras razones porque hubo que cambiar el GPS de los 'galipos'. Entre tanto, la intensidad de Eolo fue en aumento y ya se sabe que normalmente quita mucho más de lo que te da. El primer largo de los cuatro capos de la competición fue muy igualado. Realizaron el giro inaugural en el mismo segundo, pero nada más afrontar el segundo sector, Zierbena empopó una ola que le catapultó un bote por delante -tres segundos- de Urdaibai y le otorgó la confianza necesaria para creer en la bandera.

Palada a palada, los de Dani Pérez fueron ampliando el hueco sobre los 'txos' para plantarse a mitad de regata con ocho segundos de diferencia. Con la tanda bajo control, la mirada de los 'galipos' se fijó en los registros de Hondarribia que eran calcados a los suyos –un segundo a favor del bote vizcaíno al afrontar el último sector–. Pero ahora, Zierbena se encontró con el viento de cara como freno a sus intereses camino de meta y, pese a que se vació en el intento, terminó hincando la rodilla en los último 500 metros para júbilo de una Hondarribia que el sábado ante su público remará en la tanda de honor. Doble premio para los fronterizos en un verano de sinsabores hasta la fecha.