La historia de superación del surfista Ibon Oregi: «Llegó un día que parecía el cuarto hijo de la casa y con tres ya era suficiente»

Oregi subió al escenario y regaló toda una lección de vida al atender al conductor de la gala, Patxi Herranz. Este le lanzó que su experiencia «es tan apasionante que pone los pelos de punta». Con templanza respondió el vizcaíno, subcampeón del mundo en surf adaptado apenas tres años después de perder media pierna tras ser atropellado mientras entrenaba en la N-634 preparándose para un ironman.

«Ya llevo tres años así -bromeó-. La verdad es que a veces nunca sabes si te va a traer lo bueno o lo malo. Siempre digo que a veces el destino te pone en un sitio y tienes que echar hacia adelante. Me ha tocado vivir momentos malos, pero vamos mejorando», contestó Oregi. «Eres un ejemplo de superación», replicó Herranz. Y ahí llegó una respuesta que despertó la ovación de los asistentes al evento.

«Llegó un día en el que parecía el cuarto hijo de casa y con tres ya era suficiente. En el momento piensas: o echo para adelante o me quedo aquí. Siempre me ha gustado el deporte, a veces corría sin ganas, eso te ayuda. He sido terco, he tenido la suerte de echarme al mar como terapia, surfeando con una tabla vieja de mis hijos, y he llegado hasta donde he llegado por mi pasión, porque me gusta», lanzó visiblemente emocionado un Oregi que, tras ser subcampeón del mundo, sueña con ser el mejor del planeta.

En noviembre atendió a EL CORREO en el marco del foro 'Tejiendo redes para la inclusión a través de la Actividad Física y el Deporte', organizado por la Fundación GaituzSport. Lo puedes leer en este enlace. Ahí remarcó que «necesito estar en el agua, con mis amigos en la naturaleza». También aprovechó la ocasión para lanzar un alegato en pos de la inclusión en el deporte: «Nos falta mucho para que nuestra sociedad sea inclusiva. Veo que en las escuelas no es tan fácil, hay que trabajar muchísimo».