Los deportistas trabajan «convencidos» de que habrá Juegos en Tokio

El mundo del deporte no es ajeno a la amenaza del coronavirus y la creciente preocupación que genera su expansión. El preolímpico femenino de baloncesto tuvo que ser trasladada de China a Belgrado, mientras la Serie A aplazaba la pasada semana varios encuentros por el brote en el norte de Italia, se aplazó un año el Mundial de pista cubierta de Pekín y se ha pospuesto el inicio de la K League en Corea del Sur. Una serie de medidas preventivas que esta semana llegaron acompañadas de un mensaje poco conciliador de cara al gran evento del mundo del deporte como son los Juegos de Tokio, entre el 24 de julio y el 9 de agosto, y la cita paralímpica, inmediatamente después. «Debemos esperar una ventana de tres meses para decidir el destino de los Juegos», declaró Dick Pound, el miembro más veterano del COI.

Un mensaje que ha puesto en cuestión a la gran cita del deporte mundial pese a que desde Japón se han apresurado a llamar a la calma y a tomar medidas inmediatas para frenar la expansión del foco. «Con respecto a las palabras de Pound, el COI ha respondido que esta no es su posición oficial, y que está procediendo con los preparativos para los Juegos según lo programado», declaró Yoshihide Suga, portavoz del gobierno japonés, mientras el primer ministro Shinzo Abe dijo que «las próximas dos semanas son extremadamente importantes para la prevención de la escalada de la infección. Creemos que es necesario ponernos en el peor de los casos, y creemos que suspender las competiciones más inmediatas es un paso fundamental para lograr el éxito y que podamos celebrar con seguridad los Juegos». Este jueves Thomas Bach, presidente del COI reiteró su «compromiso total» con la celebración de los Juegos y aseguró que no añadirá «combustible a las llamas de la especulación».

Ante este cruce de mensajes y medidas para evitar contagios, EL CORREO ha querido pulsar la opinión de los protagonistas, de los deportistas vascos que trabajan para ganarse la plaza olímpica y mostrar su mejor versión en Japón. ¿Están preocupados por las noticias que llegan sobre los Juegos y las suspensiones? ¿Creen que la seguridad está garantizada y que el evento olímpico se celebrará con normalidad? Garazi Sánchez (surf), Diego Arana (hockey hierba), Asier García (baloncesto adaptado), Virginia Díaz (piragüismo), Iván Fernández (maratón), Made Urieta (baloncesto) y Arantza Moreno (lanzamiento de jabalina) responden a estas dudas y muestran su convencimiento de que en verano los Juegos se celebrarán, y en Tokio.

La surfista vizcaína se encuentra en Avoca (Australia), donde tiene cita con las series mundiales. Y será en mayo cuando Garazi se juegue en el Mundial de El Salvador su presencia en Tokio, porque por vez primera el surf será deporte olímpico, siempre que el coronavirus y la psicosis que ha generado a nivel mundial no lo impida. «Lo que veo es más sensación de caos que otra cosa. Yo sigo entrenando como siempre, y nadie sabe lo que pasará. A día de hoy me preocupa más esa sensación de descontrol y de haber viajado a países que ahora están afectados. ¡Si en enero estuvimos en China!», recuerda. «Nosotros seguimos con nuestros planes, y si se cancelan unos Juegos será porque el problema se ha hecho mucho más grande, porque de momento, aquí no se habla de eso».

Jugador internacional de hockey hierba, el vizcaíno vuelve a formar parte del Jolaseta y pese a que reconoce que estará «complicado» formar parte de la selección en Tokio, Diego Arana trabajará durante estos meses para convencer al seleccionador. Y mientras tanto, sigue con atención lo que sucede en torno al coronavirus y considera que «está bien que el COI hable del tema y muestre preocupación, pero por otro lado creo que la alarma es excesiva. Sabiendo que existe este problema lo que hay que hacer es tomar las medidas necesarias para evitar contagios y que el virus pueda afectar a los deportistas. Quizá pueda ser que estos Juegos puedan ser un poco más especiales por la prevención, pero nada más grave que eso».

En este sentido, Arana recuerda que «hemos estado en Nueva Zelanda y en Argentina y allí no había nada. Quizá en los países asiáticos había más preocupación», pero nada que augure «quitar unos Juegos, algo que sería excesivo teniendo en cuenta que los deportistas estamos cuatro años preparando este evento. Valorar la situación dentro de dos o tres meses, repito, me parece bien, pero después no creo que haya que tomar medidas extremas».

El jugador del Bidaideak BSR tiene claro que «se ha creado con este tema una alarma social excesiva» y asegura que «por parte de los deportistas estamos tranquilos, estamos convencidos de que los Juegos se disputarán. Llevamos cuatro años pensando en ellos y estamos seguros que estaremos en Tokio. Además, Samaranch ha dado una versión diferente de lo que dijo Dick Pound, que no hay fecha límite y que se trabaja de la mano de la OMS. Creo que en dos o tres meses este tema se habrá calmado», y en este sentido, recuerda lo que sucedió hace cuatro años en Rio «con el Zika». «Mi mujer estaba embarazada, y al final no fue por precaución. También se habló muchísimo los meses previos y al final no sucedió nada».

«Hace dos semanas estuvimos con el médico de la Federación y no nos transmitió preocupación. Solo que tomemos cualquier medida como en otras competiciones porque hay que llegar en las mejores condiciones, pero nada de alerta por este virus», afirma la remera, que estará en Tokio dentro del dos sin timonel junto a Aina Cid.

Aún así, Virginia permanece atenta a lo que se dice en los medios, aunque considera, como el resto de los deportistas consultados, que la alarma social es excesiva y que no se corresponde con lo que viven en sus respectivos ámbitos, donde el plan de trabajo se mantiene inalterable y con el reto de llegar en la mejor condición posible a Tokio. «No, no estamos preocupados, aunque en los medios se habla mucho», afirma.

El atleta alavés está feliz después de haber hecho la mínima olímpica en el maratón de Sevilla, y ahora lo que le preocupa es ganarse la plaza para Tokio, mucho más que lo que pueda decirse en torno al virus. «Los deportistas tenemos que estar preparados para competir en julio y agosto, es lo que nos toca», afirma Iván, que el domingo en Sevilla vio a la gente «preocupada en temas deportivos. No he notado nada diferente, cada uno pensaba en su carrera y en su marca, nada más». Y respecto a los Juegos, mantiene su calma. «Si hay un país capaz de hacer las cosas bien y sacar un evento adelante es Japón».

Entrenadora del Araski y parte del cuerpo técnico de Lucas Mondelo en la selección femenina, Made Urieta recuerda que ya tuvieron que disputar el preolímpico fuera de China, pero cree que «la decisión está en buenas manos. Seguro que se hace lo mejor para los deportistas. Ahora estamos con el runrún de una posible suspensión, pero creo que sería una gran faena cuando hay tantos deportistas trabajando por llegar a los Juegos. Pero en nuestro entorno solo puedo decir que hay tranquilidad, que no se habla del tema y que la preparación está encaminada a Tokio. Además, que sea en Japón siempre da tranquilidad, también sucedió hace cuatro años en Rio con el Zika y al final nada. Creo que hay que mantener la calma y confiar porque el tema está en buenas manos».

La lanzadora de jabalina deberá jugarse en los próximos meses su plaza olímpica y aunque asegura que «puedo entender que haya preocupación porque en Tokio habrá muchísima gente de todo el mundo y sería foco de infección», no termina de entender la alarma generada «cuando existen otras enfermedades que no crean semejante preocupación». En este sentido, la de Ermua introduce una variable interesante de cara a los próximos meses. «¿Qué pasaría si en plena temporada, con los deportistas buscando la plaza olímpica, se caen competiciones o se cierran fronteras como prevención y a causa de ello no logran la clasificación para Tokio?».

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