A pesar de que los Juegos Olímpicos de París finalizaron este domingo, siguen dando mucho que hablar. Jordan Chiles, gimnasta estadounidense, recibió su medalla de bronce en el ejercicio de suelo hace cinco días, junto a su compatriota Simone Biles, que se llevó la plata y Rebeca Andrade, brasileña que logró la mejor puntuación y, por lo tanto, la presea de oro. Ese momento de las tres en el podio fue una de las imágenes que se recordarán en el futuro por la representación del espíritu olímpico.
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Pero una decisión tomada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo ha hecho que Chiles pierda su medalla y pase a manos de la rumana Ana Barbosu. El motivo que se esconde detrás es una reclamación fuera de plazo, concretamente, cuatro segundos. Todo surgió cuando la rumana Barbosu, tras su ejercicio, obtuvo una puntuación de 13.700. Esto la colocaba, provisionalmente, en el tercer puesto. Pero ahora le tocaba el turno a Chiles, que debía superar esa marca para ingresar en el podio. Lo que logró fue una puntuación de 13.666, lo que la colocaba en quinto lugar. No obstante, su entrenadora, Cecile Landy, se quejó a los jueces sobre el grado de dificultad del ejercicio de su pupila, que inicialmente fue de 5.800. Esta reclamación fue aceptada y la cifra subió a 5.900, lo cual elevó su puntuación total para llegar a la tercera plaza, con 13.766.
Ana Barbosu se mostró desconsolada tras verse inicialmente en el podio. Al conocer que era la estadounidense quien iba a obtener la medalla de bronce, empezó a llorar y abandonó el pabellón. En cuarto lugar quedó otra gimnasta rumana, Maneca-Voinea, que fue penalizada por sacar el pie del cuadrilátero. La delegación rumana decidió reclamarle al Tribunal de Arbitraje Deportivo dos hechos diferentes: en primer lugar, clamaron que la reclamación de la entrenadora de Chiles ocurrió cuatro segundos después de lo permitido. Y en segundo lugar, afirmaron que su segunda gimnasta, Maneca-Voinea, no debió haber sido penalizada. Así que pidieron que se le devolviera a Chiles su puntuación inicial y se reajustara la de sus dos gimnastas.
El caso es que, por culpa de lo enrevesado de la situación, los rumanos pidieron que se les otorgase la medalla de bronce a las tres, algo que el Tribunal desestimó. La decisión final auparía a Barbosu al bronce, dejando a Chiles cuarta y sin modificar la puntuación de Maneca-Voinea, por lo que terminó en quinto lugar.
La decisión adoptada por el Tribunal ha causado un gran revuelo tanto en redes sociales como entre sus compañeras de especialidad. La estrella Simone Biles salió a manifestarse en apoyo de su compañera, señalando la decisión como injusta y mandándole apoyo a través de sus redes sociales: «Te envío mucho amor. Mantén la cabeza alta, campeona olímpica. Te queremos».
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Por otro lado, otra estrella que se manifestó fue la propia Ana Barbosu, la gran beneficiada de la decisión. En una historia de Instagram, lanzó un mensaje dedicado a Chiles y a su compatriota Maneca-Voinea: «Sabrina, Jordan, sé lo que estáis sintiendo, porque he pasado por lo mismo. Pero sé que volveréis más fuertes. Espero que las tres compartamos el podio de los próximos Juegos. Esto no hubiera sucedido si las personas al cargo hubieran respetado las reglas. Las atletas no deberíamos ser culpadas, porque las acusaciones son dolorosas».
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