El vizcaíno jugará en México antes del segundo Grande

Habían sido meses de altibajos en los que el juego no estuvo acompañado de resultados. Su rendimiento en Augusta había sido discreto y la victoria en tierras mexicanas supuso una importante inyección de moral y, como se comprobó después, un punto de inflexión en toda regla tanto en el golf del profesional de Barrika como en las tarjetas que firmó en sucesivas citas de prestigio a partir de entonces. Las buenas sensaciones habían vuelto.

El escenario para esta edición, que se disputará entre el 27 y el 30 de abril, es radicalmente distinto. Rahm llegará el Open como propietario de la chaqueta verde y a día de hoy es el número uno del mundo en una dura pugna con Scottie Scheffler y Rory McIlroy. La esencia que recuperó en México gracias en parte a la conversación que mantuvo con Tiger Woods en la cuarta jornada del penúltimo Masters se mantiene inalterable y será sin duda el gran favorito a finales de mes en un espectacular campo en el Estado de Jalisco, a orillas del Pacífico.

En 2022 llegó como líder a la última vuelta. Rahm esperó con paciencia su oportunidad y mostró su cara más ambiciosa en los instantes precisos, con el putter muy afilado. Dio los golpes de gracia en los hoyos 7 y 14. Ajusticiaron al sutil y fino Cameron Champ -que se disparó al pie en el par cuatro del hoyo 8 al tirar la bola al agua- y a un aguerrido Kurt Kitayama, que le obligó a exprimirse al máximo hasta el final. Los tres compartieron el partido estelar de la emocionante e intensa jornada en la que se resolvió el torneo. El campeón firmó una tarjeta de 69 impactos, dos bajo par, para un total de menos 17.

Pase lo que pase, la temporada del vizcaíno es para enmarcar. Y es que después de México llegarían dos nuevas muescas en el Open de España y en la Final de Dubái. Ya en 2023, sus resultados le han permitido recuperar el cetro mundial y encabezar la clasificación del PGA Tour con triunfos en el Torneo de Campeones de Hawái, el American Express y el Genesis Invitational de Los Ángeles, además de ocupar buenas posiciones en las citas en las que no ha ganado. A estos grandes resultados hay que sumar por supuesto su reciente y memorable victoria en el Masters de Augusta en una última jornada magistral en la que no dio opciones a sus rivales.

México también es una estación intermedia en su hoja de ruta hacia el PGA Championship, que esta campaña se celebra en Rochester, en el Estado de Nueva York, entre el 18 y el 21 de mayo. España tiene diez 'Majors' gracias a los cinco de Severiano Ballesteros, los dos de José María Olazabal y el propio Jon Rahm y uno de Sergio García. Pero ningún golfista del país ha sido capaz hasta la fecha de proclamarse campeón en el PGA Championship. El vizcaíno también quiere romper esta estadística.