Rahm busca su segunda chaqueta verde consecutiva: «Me siento fresco y preparado para ello»

Tras Viktor Hovland y antes del mito Tiger Woods, el de Barrika ha comparecido en la majestuosa sala de prensa del complejo ante una nutrida presencia de medios internacionales y españoles. Ante ellos ha descrito la sensación «única» que siente cuando acude a este lugar. «Es el torneo más importante del mundo, sin ánimo de ofender a nadie. Todas las tradiciones, las fotos, las historias lo hacen tan, tan especial. Ser parte de la historia de este club, con jugadores tan selectos... No sabría cómo explicarlo».

Como especial fue también la fecha de su triunfo en la pasada edición. «El cumpleaños de Seve (Ballesteros), la Semana Santa y todas las coincidencias que se dieron ese domingo es lo que lo hizo tan especial. Obviamente, todos los momentos familiares del final fueron geniales. Ese momento de mi padre y yo con mi hijo... Es difícil expresarlo con palabras, no puedo describirlo», ha dicho visiblemente emocionado.

Ahora, Rahm acude a la cita en medio del terremoto generado en el mundo del golf tras la irrupción del LIV, que se hizo con su fichaje en diciembre. Una decisión que motivó la expulsión del vizcaíno del PGA y sobre la que ha admitido que «el hecho de estar exento los próximos cinco años para los grandes ayudó bastante». Cabe recordar que antes de que ganase el Masters, título que le concede el acceso a Augusta de por vida, su triunfo en el US Open de 2021 le otorgaba un mínimo de un lustro para competir en los cuatro grandes.

Todo ello a falta de un acuerdo entre circuitos que Rahm sigue defendiendo a capa y espada: «Hay mucha gente mucho más inteligente que yo que podría resolver esto de una manera mucho más eficiente. Pero la respuesta obvia es que tiene que haber una manera justa de que todos compitan. Tendrán que encontrar una forma de evaluar cómo lo están haciendo los jugadores del LIV y cómo pueden ganarse el puesto», ha desarrollado.

Cuestionado sobre la preparación de cara a la cita, Rahm ha restado importancia al hecho del cambio de formato del LIV, donde se compite en tres jornadas y sin cortes, a diferencia de las clásicas cuatro del PGA, como es el caso de Augusta. «Volver aquí no cambia mucho. Solo he jugado cinco torneos del LIV, el resto de mi vida ha sido en formato tradicional. Una vez que empiezo a jugar se me olvida que son tres, a veces me lo tienen que recordar. Sí considero que jugar a cuatro vueltas favorece a los mejores, pero no garantiza nada tener 18 hoyos más».

A tenor de los resultados, su puesta a punto es óptima. Es el único jugador del LIV en hacer top-10 en los cinco certámenes hasta la fecha. Tercero en Mayakoba (México), quinto en Las Vegas, octavo en Yeda (Arabia Saudí), quinto en Hong Kong y cuarto en Miami, este último firmado el pasado domingo. «La preparación es la misma. El año pasado, incluso habiendo ganado tres torneos, no era favorito porque el último mes no estuve bien. Este año no he ganado pero he estado bien, me recuerda al US Open de 2021. No había ganado antes pero llegué en muy buena forma».

Este martes Rahm será el protagonista de la Cena de Campeones, a la que invitará a los antiguos conquistadores de la chaqueta verde. «Todo el mundo parece muy entusiasmado con el menú, así que hay mucha presión. Estoy un poco nervioso», ha reconocido el vizcaíno. «Es bastante abrumador pensar tener que levantarte en la sala y hablar con todas las leyendas de este juego. Sin duda es tan maravilloso como estresante».

El contundente menú es «una experiencia vizcaína» y lo ha diseñado el chef José Andrés. «No he podido hablar mucho con él. Cuando hizo el de Sergio (García, ganador en 2017) le dije: 'Si algún día gano lo haces tú'. Se lo he dicho durante seis años y el año pasado se enteró primero tras la rueda de prensa porque le llegaron muchos mensajes», ha recordado Rahm en un momento que ha provocado las risas del público. En su discurso recordará la figura de Seve, fallecido en 2011 y que hoy cumpliría 67 años.

Rahm también ha pasado revista a otros asuntos como los Juegos Olímpicos o la Ryder Cup. Sobre esta última, ha asegurado estar «preocupado» acerca de su participación en la edición de Nueva York en 2025. El LIV no otorga puntos, aunque el capitán se reserva la opción de elegir a dedo. «Espero poder estar y jugar lo suficientemente bien para ganarme el puesto. Y si tengo que ser elegido, espero poder serlo». En cuanto a la cita de París, ha avisado que «será mi cuarta semana seguida de competición», pero «después del fastidio de Tokio será divertido representar a España».