Secciones
Servicios
Destacamos
Edición
Carlos Nieto y Gonzalo de las Heras (gráficos)
Enviado especial. Augusta
Jueves, 10 de abril 2025, 00:21
Rozar el doble dígito en cuanto a presencias en el torneo más selecto del mundo permite obtener muchas conclusiones. Jon Rahm comienza este jueves (19.30 horas) su noveno Masters y en los últimos ocho años siempre ha superado el corte. En total, ha completado 32 vueltas al Augusta National, 576 hoyos. Detrás de esta cifra se esconden experiencias de lo más variadas, de eagles a dobles bogeys. El vizcaíno sabe dónde están sus puntos fuertes y sobre todo conoce los débiles, esos momentos en los que a veces conviene no arriesgar para seguir con vida.
El campo de Augusta National alberga el Masters desde 1934. En esta ocasión vamos a centrarnos en los hoyos que marcan el recorrido de Rahm.
Para ello vamos a elegir tres parejas: dos pares 3, dos pares 4 y dos pares 5, y analizar el que mejor y peor se le dan de estas duplas.
Aunque en la edición pasada no puso sacarle partido, el de Barrika sabe que sus opciones pasan por lograr birdies en este desafío para iniciar su vuelta con confianza. El green es alcanzable de dos golpes si se tiene acierto. Cuenta con el menor número de golpes de siempre en los pares 5 del recorrido.
Superarlo es primordial en la carrera por la chaqueta verde. Prácticamente recto y cuesta arriba, basta con eludir los bunkers situados a la izquierda y acertar con los hierros para labrarse oportunidades. Es el par 4 que registra mejores números en la historia del Masters.
Supone un verdadero desafío. Es el lugar más exigente de la primera mitad del recorrido. «No hay ningún lugar donde puedas decir: 'Voy a hacer este tiro cerca del hoyo'», valora Rahm sobre esta enredadera. Un green cuesta abajo, dos bunkers le flanquean, viento impredecible...
La ultima vez que lo jugó Rahm se fue con doble penalización. Es el preludio del Amen Corner y el inicio de la parte más dura del campo. Su salida es espectacular porque es cuesta abajo, lo que motiva los golpes más largos del Augusta National. De cara al segundo golpe la pendiente es cuesta abajo. Hay que evitar los fallos por la izquierda.
Entre el 10 y el 15 se encuentran los puntos más débiles del vizcaíno en el Masters. No es para menos. Siempre tiene algo que decir porque su lado izquierdo está amenazado por la presencia de pinos. Tiene un bunker situado antes del green que puede ser la mejor escapatoria.
La última vez que lo jugó se fue de allí con un doble bogey, pero Rahm presenta sus mejores estadísticas en el antepenúltimo hoyo del Augusta National. Supone un espectáculo para el espectador porque los jugadores deben superar un lago. En 2020, en una ronda de prácticas, el vizcaíno logró un hoyo en uno después de que su bola hiciera 'ranitas'. Era el día de su 26° cumpleaños.
AUX STEP FOR JS
Los datos del Masters no engañan. Basta con comparar el desempeño de Rahm en la primera mitad del recorrido con el de la segunda. El de Barrika atesora un global de -30 entre el primer y el noveno hoyo (35,06 golpes de media), mientras que entre el décimo y el decimoctavo desafío su tarjeta desde 2017 a 2024 recoge un -3 (35,91), prácticamente en el par. La media es de 70,97, una cifra muy buena en el par-72 de Augusta. Así se explica que la mayoría de los hoyos en los que saca más partido al campo se concentren al principio.
Noticia relacionada
Hemos visto encima de estas líneas los mejores y peores hoyos. Vamos a repasar de forma breve los 18 hoyos del Masters y el resultado de Rahm en ellos. Pares 3: hoyo 4 (3,19 golpes, +6), hoyo 6 (3,09 golpes, +3), hoyo 12 (3,13 golpes, +4) y hoyo 16 (3,03 golpes, +1). Pares 4: hoyo 1 (4,03 golpes, +1), hoyo 3 (3,69 golpes, -10), hoyo 5 (4,13 golpes, +5), hoyo 7 (4 golpes, al par), hoyo 9 (3,94 golpes, -2), hoyo 10 (4,22 golpes, +7), hoyo 11 (4,03 golpes, +1), hoyo 14 (4,06 golpes, +2) y hoyo 17 (4,09 golpes, +3). Pares 5: hoyo 2 (4,41 golpes, -19), hoyo 8 (4,59, -13), hoyo 13 (4,53 golpes, -15) y hoyo 15 (4,63 golpes, -12).
Otros datos más allá de los hoyos. La vuelta más baja de Rahm son 65 golpes. Lo consiguió en dos ocasiones. Tras una mágica tercera ronda en 2018 (su segunda participación) salió el domingo cuarto a seis golpes del líder y ganador Patrick Reed. El vizcaíno mantuvo su posición y se quedó a cuatro golpes de la chaqueta verde. Repetiría en el estreno de 2023, el año en el que se impuso. Cuajó una jornada perfecta y eso que de su primer hoyo se fue con un doble bogey.
Pocas veces mienten las estadísticas. Si miramos, por ejemplo, al porcentaje de calles cogidas, vemos que el año que más cogió (48, un 85,7%) fue el de su victoria en 2023. No visitar el rough y estar acertado con el primer golpe es fundamental en un campo que no permite despistes. En la otra cara de la moneda, la edición que menos calles cogió fue en su debut, con 33 (58,9%). Con el approach, más de lo mismo. En 2023 cogió más greenes que nunca (52, 72,2%) para salir campeón, mientras que un año antes se enredó con los hierros y bajó hasta 41 (56,95).
Sorprende que el año pasado, en su peor Masters, Rahm liderara la estadística de greenes alcanzados con 51 (70,8%). ¿Por qué se le dio tan mal, entonces? Por sus problemas con el putt. Se fue hasta los 130, a 32,5 por ronda. Su peor cifra de lejos. Hasta 59 jugadores estuvieron mejor que él en los golpes finales. Cuando mejor pateó fue en la edición que la pandemia obligó a aplazar a noviembre de 2020. Apenas tuvo que tirar sobre el green 111 veces (27,75 por día).
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Fernando Morales y Sara I. Belled
Fermín Apezteguia y Josemi Benítez (gráficos)
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.