La versión del padre de Lamine Yamal a la Policía: sus agresores le citaron para «hacer las paces», pero le tendieron una «trampa»

Mounir Nasraoui, el padre de Lamine Yamal, sigue recuperándose en el hospital. Ya se encuentra en planta tras ser apuñalado en un aparcamiento situado a pocos metros de un pequeño campo de fútbol en el que la ahora estrella del Barcelona comenzó a dar sus primeros pinitos con el balón. Un ataque ha provocado una gran conmoción y del que dos días después se conocen más detalles.

Según ha publicado este viernes en exclusiva 'La Vanguardia', los cuatro detenidos, que pasarán hoy a disposición judicial, son miembros de una misma familia del barrio de Rocafonda y le tendieron una «trampa» a Mounir, que acabó con tres heridas de gravedad, dos en el abdomen y otra en un costado. Aunque todos residen en el barrio de Rocafonda, donde Yamal se crió, unos y otros no se conocían de nada, por lo que no existían rencillas previas.

El diario ha tenido acceso al atestado que en las últimas horas han redactado los Mossos d'Esquadra, en el que se explican los dos incidentes que el padre de Yamal tuvo con los cuatro acusados. Se trata del relato de los hechos de Mounir a la Policía, que 'La Vanguardia' desvela partir de varias fuentes consultadas del entorno del jugador. El primero de los incidentes tuvo lugar a las tres de la tarde cuando el progenitor del futbolista paseaba por la calle y un niño que jugaba con un barreño de agua en un balcón tiró agua y le salpicó.

Al parecer, fue un acto inofensivo. Sin embargo, Mounir creyó lo contrario y mostró su enfado, algo que molestó al hermanastro y al abuelo del pequeño, que salieron a la calle a enfrentarse con él.

Esta escena es la que se captó en un vídeo que ha circulado por las redes sociales. Mounir fue ayudado por un amigo y patrullas de la Policía se presentaron en el lugar alertadas por los vecinos de la zona. El padre de Lamine expresó su deseo de denunciarles, pero se marchó a la casa de su madre. El apuñalamiento ocurrió a las 9 de la noche.

El atestado policial indica que los tres hombres, más un cuarto que se unió a la agresión de la noche, sabían quién era Mounir. Estos le buscaron para, supuestamente, «hacer las paces». Según la versión del padre de Yamal, éste accedió a quedar con ellos en un parking al aire libre, pero no le dejaron escapatoria. Le rodearon y le atacaron con golpes, patadas y tres puñaladas con armas blancas que rozaron algunos órganos. De nuevo, un amigo evitó males mayores y el padre de Lamine se recupera en el hospital.

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