«No vale solo con hablar, hacen falta sanciones duras»

«En el primer tiempo me han hecho sonidos racistas. No es la primera vez que me pasa ni a mí ni a mis compañeros. Tenemos que hacer algo», declaró Maignan a DAZN Italia. «En el Milan somos una familia. Estamos aquí para jugar, darlo todo a los aficionados, brindar espectáculo. Por eso, aunque estaba disgustado por haberme ido, tuve el apoyo de todos y tomamosa decisión de volver al campo. No podía dejar a mis compañeros así», explicó el francés, quien denunció el comportamiento de una parte de la hinchada del Udinese al árbitro Maresca.

El guardameta galo avisó al colegiado en el transcurso de la primera parte de que estaba siendo objeto de insultos racistas. Lo hizo hasta cuatro veces hasta que se hartó de escuchar palabras humillantes y sonidos que imitaban a un mono. Se fue el vestuario y el resto de sus compañeros le siguieron. Cinco minutos después, en la recta final de la primera mitad, con 0-1 en el marcador a favor del Milan y algunos de los jugadores del Udinese pidiendo explicaciones a su propia afición y pidiéndoles que dejaran de lanzar proclamas ofensivas, Maignan y el resto del conjunto 'rossonero' volvieron al campo y el árbitro reanudó el choque. Avisó de que, en caso de repetirse lo ocurrido, el partido quedaría suspendido. «Estaba enfadado, no desilusionado. No es la primera vez que sucede», lamentó el francés.

Apoyos de Mbappé, Griezmann...

El Milan y la Serie A no tardaron en denunciar las actitudes racistas de una parte de la grada del Udinese: «En nuestro fútbol no hay absolutamente ningún lugar para el racismo. Estamos consternados y estamos contigo, Mike», expresó el club 'rossonero'. La liga italiana se sumó a la ola de las reprobaciones: «La Lega Serie A condena toda forma de racismo», expresó en las redes sociales. También lo hicieron futbolistas como Kylian Mbappé, Antoine Griezmann y Marcus Thuram, entre otros. Todos ellos se solidarizaron con Maignan y le arroparon públicamente.

«Estás lejos de estar solo, Mike Maignan. Estamos todos contigo», manifestó Mbappé. «Siempre los mismos problemas y ninguna solución. ¡Es demasiado! No al racismo», clamó la estrella del PSG. En la misma línea se manifestó Griezmann. «Estamos juntos, Mike. ¡No al racismo!, escribió el jugador del Atlético en sus redes sociales. Otro internacional francés, Marcus Thuram, futbolista del Inter, 'subió' a Instagram un puño cerrado en señal de protesta y un corazón sobre una fotografía de su compañero insultado.