Triunfo parcial de la Superliga en los tribunales

La Superliga ha conseguido un triunfo parcial en el tira y afloja judicial que mantiene desde hace tiempo con la UEFA. La Audiencia Provincial de Madrid ha reactivado las medidas cautelares que impiden a este organismo y a la FIFA adoptar acciones que «prohiban, restrinjan o condicionen» su puesta en marcha. La sentencia apunta que ni el órgano que preside Aleksander Ceferin ni el máximo estamento del fútbol mundial «pueden justificar su conducta anticompetitiva como si fueran las únicas depositarias de determinados valores europeos», sobre todo, si eso «les sirve para sustentar un monopolio desde el que poder excluir u obstaculizar la iniciativa del que aspira a ser su competidor».

Los magistrados consideran que su conducta «no pueda justificarse como una protección de los intereses generales del fútbol europeo». Al contrario, «es una actuación que reúne todas las características de un injustificable abuso por quien ostenta una posición dominante». Asimismo, apuntan que «el proyecto de la Superliga no sería incompatible con que los clubes interesados pudieran seguir tomando parte en las competiciones nacionales que, desde el punto de vista del derecho de la competencia, se corresponden con mercados relevantes distintos al de las internacionales de nivel europeo».

Este fallo de la Audiencia Provincial de Madrid choca frontalmente con el informe del abogado general de la Unión Europea, Athanasios Rantos, emitido el pasado mes de diciembre sobre la reclamación que hicieron Real Madrid, Barcelona y Juventus respecto a si la UEFA ejerce monopolio en la organización de competiciones internacionales. En su dictamen, Rantos daba la razón a los organismos que gobiernan el fútbol en la actualidad dejando claro que pueden vetar en sus competiciones a los participantes de la Superliga. «Si bien la European Super League Company tiene libertad para crear su propia competición de fútbol independiente, no puede, además hacerlo, continuar participando en las competiciones de fútbol organizadas por la FIFA y la UEFA sin la autorización previa de esas federaciones», recoge el dictamen, que no es vinculante. La decisión final al respecto la adoptará el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, probablemente en marzo.