El Portugalete no pasa de un empate áspero ante el Anaitasuna

Iban Fagoaga apostó por los nuevos. Tres de las cuatro incorporaciones que han hecho en este mercado invernal saltaron de inicio. Fue un duelo muy trabado durante toda la primera mitad. Ambos conjuntos se intercambiaban la posesión del balón, con dominio muy alterno y sin que ninguno de los dos amenazara con cambiar el marcador inicial. Apenas hubo acercamientos con peligro. De hecho, el único disparo a puerta fue de Mikel Aramendi en el minuto 22, que atrapó Aritz Castro sin ningún problema. El Portugalete mostró mayor fortaleza defensiva que en el resto de encuentros esta temporada, pero le faltó tener más mordiente en la parcela ofensiva para ponerse por delante.

No cambió mucho la cosa tras el paso por vestuarios. Los locales gozaban de mayor posesión de balón, pero no lograban atravesar la muralla defensiva de los azkoitiarras. Mientras, su rival triangulaba más rápido y de vez en cuando intentaban algún disparo, aunque no fuera en situaciones muy propicias para ello y no provocaban peligro. No había nadie que se saliera de los esquemas y pareciera que podía desequilibrar la balanza. El único de los portugalujos que ofreció algo distinto fue el último fichaje: Unax Álvarez de Eulate. El joven extremo mostró su atrevimiento con el balón en los pies continuamente. A pesar de que algunas veces no le salieran las cosas, daba la sensación den que algo podía pasar cuando recibía.