El Arenas golea a la Mutilvera y logra la permanencia en un tenso partido donde intervino la Guardia Civil

Los vizcaínos tuvieron que celebrar la permanencia en el vestuario porque en las gradas el ambiente estaba muy encendido. Dos expulsiones al Mutilvera durante la primera parte y otras dos en los minutos finales, provocaron que el público estallase contra el trío arbitral tuviendo que intervenir la Guardia Civil. Agentes de la benemérita se llevaron a los colegiados escoltados hasta el vestuario.

Con apenas treinta minutos de juego el jugador local Niwa agredió incomprensiblemente a un futbolista del Arenas mientras este estaba tendido en el césped. Le propinó una patada y el árbitro le mostró la tarjeta roja directa. Diez minutos después, aún en la primera parte, uno de los atacantes de la Mutilvera se fue expulsado tras hacerle una «peineta» al asistente que señaló un fuera de juego. El Arenas, mientras, se centró en jugar al fútbol y se fue al descanso con ventaja en el marcador. El miedo a caer por el precipicio del descenso y la bronca desatada con el trío arbitral hicieron el resto.

El Arenas estaba siendo muy superior en Pamplona, incluso antes de que la Mutilvera se quedase con nueve jugadores. En los primeros instantes del encuentro la escuadra getxotarra mostró una imagen dominadora, con una presión al rival en su propio campo. Los pupilos de Toño Vadillo se adelantaron en su primer acercamiento, cuando corría el minuto siete. Lamadrid conectó un remate certero tras un buen centro de Sillero desde la banda derecha al que Equiza no pudo llegar. Y cuando iba a cumplirse el primer cuarto de hora de juego el Arenas hizo valer su dominio y amplió su ventaja. Fue Valiño el que remató al primer toque un centro de Arenal. Álvaro Iglesias pudo poner el 0-3 con un disparo lejano cuando Equiza se encontraba fuera de la portería, pero su tiro se marchó desviado.

El cuadro navarro estuvo cerca de recortar diferencias en los siguientes minutos. Primero fue Pascal, a pase de Aldave, y después Telletxea y Jaime Dios los que obligaron a Carrio a intervenir para evitar el gol local. Fue en el tiempo de descuento de la primera parte y ya tras las dos expulsiones cuando llegó el tanto de los pamploneses. Losantos interceptó un pase de Alvaro García cerca de su área y finalizó la jugada con un disparo que entró por la escuadra.

Durante el inicio de la segunda mitad el equipo navarro fue el que dominó el juego, y estuvo cerca de empatar hasta en dos ocasiones. En el minuto 51 Losantos conectó un remate desde la frontal del área que Carrio detuvo en dos tiempos. Y poco después, el recién ingresado Lizarraga probó con un remate desde dentro del área que obligó al meta del Arenas a desviar el balón a córner. Sin embargo, con el paso de los minutos la energía del conjunto navarro, con dos futbolistas menos, se fue agotando, y Valiño anotó el 1-3 con una buena definición tras una pared con Escobar en el minuto 78.

El final del partido estuvo marcado por la expulsión de otros dos jugadores locales, quedando así únicamente con siete efectivos sobre el terreno de juego. El primero en irse a la caseta fue Aizpún por cometer una falta siendo el último defensor, y el segundo, Asier Pérez, ya en el tiempo añadido, que vio la segunda amarilla por un agarrón en una jugada en la que no parecía que hubiese demasiado peligro. Entre ambas acciones Álvaro García puso el definitivo 1-4 con un disparo magistral desde la frontal del área que superó a Equiza. Tras el pitido final el trío arbitral tuvo que abandonar el terreno de juego escoltado por la Guardia Civil.