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Domingo, 27 de enero 2019, 18:11
Ocurrió en el último minuto del Manlleu-San Cugat, partido correspondiente a la Primera División Catalana celebrado este domingo. El portero del Manlleu sube a rematar el último córner y logra el sueño de todo guardameta, marcar gol. Sin embargo, tras la feliz celebración, ... el guardameta ve cómo el árbitro del encuentro anula el tanto por mano. El cancerbero no se toma nada bien la decisión y es expulsado. Es entonces cuando propina una brutal patada al colegiado, que se desploma sobre el césped. Por fortuna, el árbitro vuelve a levantarse. Eso sí, con una señal en su muslo del irascible futbolista catalán que seguro que se pasa una larga temporada sin volver a jugar como castigo a su violenta acción.
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