Iñigo Agiriano
Domingo, 16 de abril 2023, 23:16
Roberto de Zerbi se ganó un nombre en Europa como entrenador del Sassuolo. Allí, en el modesto club de Emilia-Romagna, mantuvo sin apuros la categoría durante tres temporadas consiguiendo dos meritorios octavos puestos. Todo ello lo hizo, además, con una receta atractiva: un fútbol ... que buscaba jugar desde atrás y madurar las jugadas con paciencia para, de pronto, una vez encontrado el espacio, resolver las acciones de forma fulgurante. Su trabajo llamó la atención del Shakhtar, un club que suele apostar por entrenadores de ese perfil, pero la aventura en Ucrania no fue como De Zerbi imaginaba y el pasado verano se quedó sin equipo.
Publicidad
Y si lo encontró fue de casualidad. De carambola. El magnate del Chelsea, Todd Boehly, había despedido a Thomas Tuchel nada más comenzar la temporada y se encaprichó de Graham Potter, técnico del Brighton, por el que tuvo que pagar casi veinte millones de euros. La marcha de Potter parecía una pésima noticia para los seagulls (las gaviotas). Sin embargo, su directiva mantuvo la compostura y buscó en el mercado un entrenador de un perfil similar. De esa forma, Roberto de Zerbi llegó a la costa sur de Inglaterra, a un proyecto ya comenzado y con las expectativas por las nubes tras un gran inicio de temporada.
Su éxito está siendo una de las noticias de la Premier esta temporada. Para comprender cómo ha sido el trabajo del italiano y el impacto que está teniendo su propuesta basta con recordar las palabras que la semana pasada le dedicó al Brighton (séptimo en la tabla) ni más ni menos que Pep Guardiola. «El mejor equipo del mundo en llevar el balón desde su portero hasta la portería contraria», sentenció.
Es sabido que el entrenador catalán tiene una cierta tendencia a la exageración, pero en este caso tampoco exageraba demasiado. Para comprobarlo basta con ver cualquier partido del equipo de De Zerbi. En su último encuentro, ante el Chelsea en Stamford Bridge, el Brighton jugó como los ángeles, demostrando una superioridad pasmosa ante un equipo del big six. El propio Lampard reconoció la superioridad futbolística de un rival, en principio, modesto, al que un gran entrenador está agigantando. Si el resultado fue corto (1-2), se debió a la falta de gol, el gran problema de este equipo.
Accede todo un mes por solo 0,99€
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.