Quique Sánchez Flores condena los insultos racistas a Acuña: «Estoy orgulloso de cada poro de mis venas que me pueda respirar gitano»

Nuevo episodio racista en un campo de fútbol en España. Era el minuto 68 de encuentro que enfrentaba a Getafe y Sevilla en el Coliseum. Entonces, desde un sector de la grada han proferido gritos de «mono» y «vienes del mono» contra el sevillista Marcos Acuña. El árbitro Iglesias Villanueva ha decidido parar el partido y avisar al delegado de campo, al que señaló la grada lateral. Es lo que marca el protocolo antiracista. El colegiado puso los hechos en conocimiento de los entrenadores y capitanes de ambos equipos. Tras anunciar por megafonía lo sucedido, el encuentro se reanudó dos minutos y medio después »no produciéndose en ninguna ocasión más en el encuentro«, tal y como refleja el acta arbitral.

Nada más terminar el partido, en respuesta a estos lamentables hechos, el Sevilla publicó un mensaje en sus redes sociales en el que «condena los insultos racistas y xenófobos sufridos este sábado por su jugador Marcos Acuña y su cuerpo técnico» durante el encuentro. También salió al paso el técnico Quique Sánchez Flores, muy crítico por lo sucedido. «Estoy absolutamente orgulloso de cada poro de mis venas que me pueda respirar gitano. Pero una cosa es ser gitano o parte gitano y otra cosa es que lo utilicen como un insulto racista. Me parece aberrante que en estos tiempos donde se está avanzando en tantas cosas, nos agarren para atrás y nos digan cosas que me parece se salen absolutamente de cualquier mínimo espacio de convivencia», ha denunciado en rueda de prensa.

En ese sentido, Sánchez Flores criticó que «aquí, parte del público, porque hay parte que no, se cree que puede venir aquí a decir lo que quiera. Y eso es lo que está pasando en todos los estadios del mundo». «Nosotros somos trabajadores. Venimos a trabajar en paz. En un estadio, en un espacio, en el que se nos tiene que respetar. Hacen tantas cosas en el fútbol en tantas direcciones y tan poco en lo que realmente importa... Yo entiendo que igual tiene que pasarle esto a alguien muy gordo, a alguien muy grande para que al final se dé un giro y todos los mecanismos de los poderes se pongan a trabajar en esto. Insisto, es lamentable», ha reiterado.

El técnico del Sevilla ha descatado que «ha habido gente que se ha portado muy bien ahí en la grada» a pesar de lo ocurrido. Pide, eso sí, «que si entre todos no hacemos algo no va a haber la oportunidad de que demos a las generaciones que vienen detrás un lugar y un espacio donde la gente va a pasárselo bien, no a insultar, como van al tenis, al baloncesto o al golf».

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