El Sestao River, a la orilla de la gesta

Que el Sestao River, en puestos de descenso, sume un punto contra el líder, podría parecer una buena noticia. Sin embargo, la sensación fue muy contraria por el fondo y las formas. El conjunto verdinegro fue notablemente superior al Gimnàstic de Tarragona durante la mayor parte del encuentro, realizando una actuación soberbia. No obstante, un tanto de los catalanes en el descuento echó todo el trabajo de los sestaotarras por tierra, que se quedaron a la orilla de la gesta, permaneciendo así a tres puntos de la salvación.

Aitor Calle apostó por un once inédito para recibir al líder en Las Llanas, con la curiosidad de que los diez jugadores de campo eran vascos. Todos excepto el portero, dónde también se presentó la novedad de que salió de inicio Pere Joan, guardameta cedido por el Mallorca, que no actuaba de titular desde la novena jornada, hace casi cuatro meses. El planteamiento funcionó a los verdinegros, que fueron dominadores absolutos. No se arrugaron ante el poderío del cuadro catalán y supieron hacerse fuertes en su casa.

La primera ocasión corrió a cargo de Aitor Aranzabe, quién finalizó una buena jugada combinativa, pero su disparo tocó en un zaguero yéndose a córner. Solo trece minutos después, el Sestao River gozó de una clara oportunidad de ponerse por delante. De hecho, parte de la grada de Las Llanas gritó gol cuando Gaizka Martínez remató de cabeza a bocajarro desde el segundo palo un buen centro de Cabo a raíz de un saque de esquina. Sin embargo, Parra realizó una gran intervención para evitar el tanto.

El Nàstic no estaba cómodo. Los de la Margen Izquierda estaban haciendo sangrar a un equipo que parecía inmortal durante las últimas jornadas, habiendo cosechado siete victorias y un empate antes de visitar Las Llanas. De todos modos, se sabía que, con su potencial, en cualquier momento podía sorprender a la escuadra sestaotarra. Lo hizo en el minuto 42, marcando gol Pol Domingo después de una falta lateral, aunque lo hizo en clara posición adelantada y el colegiado lo anuló por fuera de juego.

El cuadro local salió del paso por vestuarios con mucha energía y mordiente para poner al Nàstic contra las cuerdas. Incluso había incredulidad en la grada al ver que los suyos no se adelantaron cuando Mateo estrelló el balón contra el poste y Parra realizó un paradón espectacular a Cabo para evitar un gol cantado nada más empezar la segunda parte. El tan esperado tanto llegó en un penalti provocado por Kaxe que transformó él mismo de manera soberbia con un fuerte disparo por la escuadra para estrenarse como goleador en el Sestao River, al que ponía muy de cara para lograr la gesta de tumbar al líder.

A partir de ese momento, tocaba hacer una gran labor de resistencia, ya que el Nàstic les embotelló en su área, anotando incluso otro gol anulado por fuera de juego. Los sestaotarras tocaban la gloria con la yema de sus dedos, hasta que, en el tiempo de descuento, un gol de Óscar Sanz les aguó por completo la fiesta, firmando un empate que no hizo justicia a su valentía y buen hacer.

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