«La presión de marcar goles no me pesó porque sé que en eso soy bueno»

-¿Es especial este partido del domingo ante el Bilbao Athletic?

-Sí. Cuando juegas ante tu exequipo y tienes tanta relación con tus excompañeros pues es muy especial.

-Desde los 13 a los 20 años estuvo integrado en la cantera de Lezama tras su fichaje desde el CD Falcesino.

-Fueron muchos años con jugadores como Lorente, Cabo, Jon Guruzeta... Jugadores con los que compartí muchos momentos y es especial volver a verlos.

-El cambio de entrenador de Pallarés por Arostegi puede condicionar la cita de Tajonar.

-No es muy habitual en Lezama. A Bingen lo tuve y es un gran entrenador, pero si los resultados no han acompañado, si cambian al técnico será por algo. Ayer comentaron en el vestuario el cambio de entrenador, pero el míster no nos ha dicho nada de eso. Lo que quiere es que nos centremos en nosotros. Pero espero que este domingo, no, pero que después cambien esta dinámica.

-¿Qué recuerda de aquel debut en Haro con el Bilbao Athletic con Joseba Etxeberria en el banquillo?

-Hice una buena pretemporada con el Basconia, Etxebe me llamó y en esa primera jornada de Segunda B llegué a debutar. En ese equipo estaban Ezkieta, Areso, Morcillo, Sancet y ganamos 1-4.

-No tuvo más ocasiones...

-Después ya no. Volví al Basconia y no tuve la oportunidad de volver a subir.

-Aquella lesión de menisco le laminó en el Basconia tras empezar con 7 goles en 28 partidos en su primera campaña con Solabarrieta, y acabar en la tercera con 1 en 16 a las órdenes de Patxi Salinas.

-En el Basconia empecé bien, con Solabarrieta la verdad es que fue un entrenador muy especial para mí. Marqué siete goles. El segundo año ya con Salinas tuve esa lesión de menisco que me apartó varios meses del equipo. Luego nos pilló el confinamiento justo cuando estaba a punto de recuperarme, y a la vuelta me costó bastante más. Me acuerdo que acabamos con el play off de ascenso perdiendo ante el Portugalete.

-¿Le pudo pesar su fama de goleador en las inferiores con esa burrada de 52 goles en el Cadete y 34 con el Juvenil a la hora de plasmarlo en el Basconia de Tercera División?

-No creo, ya que con 16 años estaba ya en el Basconia. Había marcado siete goles antes de Navidad y es ahí cuando decidieron subir a Solabarrieta (al Bilbao Athletic) y entonces sí es verdad que con Patxi Salinas no conseguí tener la confianza que tenía antes. Eso fue lo que más me marcó, no la presión de marcar goles porque yo sé que en eso yo era bueno, y sigo siendo.

-Fue internacional con la selección española Sub-17 con su compañero Beñat Prados y los Eric García, Barrenetxea, Pacheco, Camello y Bryan Gil...

-Sí, eso fue en cadetes. Fueron tres días en la selección, que eso tampoco lo voy a olvidar, junto a jugadores que ahora ya ves en Primera División.

-Se decidió por poner pie en pared y fichar por Osasuna. ¿Fue una decisión meditada o necesitaba un cambio de aires?

-Ya sabía desde hace unos meses que era el momento de salir. Yo no podía estar en Lezama, necesitaba un cambio de aires. Me decidí por venir a Tajonar, cerca de casa. Se me dio esa oportunidad y estoy muy feliz.

-No le va mal. Ascenso además a Primera Federación.

-El año pasado fue espectacular. Tenía ficha del CD Subiza, el Basconia de Osasuna. Hice la pretemporada con el Promesas y a los dos meses me llamó Castillejo para que entrenara con ellos todos los días y estuve casi toda la temporada. Ya con 10 partidos no podía bajar y lo acabamos combinando con el ascenso a Primera Federación. Marqué 12 goles con el filial y tres en 200 minutos con el Subiza, que fueron importantes.

-Meter goles no se le ha olvidado...

-No, no, soy un jugador que me ha gustado siempre jugar cerca del área y ahí me manejo bien. Eso es lo que tengo que explotar.

-Este curso, suma cuatro partidos con la competencia feroz en la delantera de Barbero, del 98, que desciende del primer equipo de Jagoba Arrasate, y el ex del Rayo y SD Amorebieta, Sergio Moreno, de 99. Mucho tráfico de 9...

-Sí, estamos bastantes delanteros en el Promesas. Yo ya sabía la situación por la que me iba a encontrar. Hice una buena pretemporada y estoy preparado para lo que el míster quiera. Barbero y Sergio Moreno son buenos delanteros. Me estoy adaptando porque a Castillejo le gusta ponerme también de extremo y ahí andamos. Debo seguir entrenando para cuando el míster me dé la oportunidad.

-Osasuna Promesas es sexto con 18 puntos en este Grupo 2 y el Bilbao Athletic el 20, último, con 12 puntos. ¿Lo esperaba? A priori no era lo programado.

-Para nosotros no era lo esperado. Al debutar en la categoría pensábamos que nos iba a costar mucho más, pero empezamos muy bien. Somos un equipo que compite muy bien y no nos arrugamos ante nadie. El equipo que quiera ganarnos lo va a tener que hacer muy bien. Tenemos muy buen equipo, con mezcla de jugadores experimentados y jugadores jóvenes.

-Nombres propios, ¿a quién tiene que temer el Bilbao Athletic de Pallarés del filial rojillo?

-En defensa el central Jorge Herrando, que está en muy buen momento, Iker Muñoz en el centro del campo y Barbero arriba. Tampoco es que uno destaque muy por encima de los demás. Somos un equipo muy compacto y todos vamos a una.

-¿Qué le parecen Villalibre y Guruzeta en la delantera del Athletic con lo complicado que es asentarse en Primera desde la cantera?

-A Guruzeta le veo a un nivel muy alto. Lleva cinco goles con muy pocos minutos y el año pasado marcó 13 en el Amorebieta. Tanto él como Villalibre creo que se han asentado en el Athletic pese a la competencia que tienen.

-A Urain y a Aritz Pascual les está costando bastante acoplarse al once inicial. Arostegi, hasta ahora, tiraba más del falso 9. ¿Le extraña?

-Ya me he fijado que estaba poniendo a un falso 9. Me extraña bastante teniendo a Urain y Pascual. A Ewan lo conozco mucho, a Pascu menos, y me parece raro, aunque la decisión de Bingen del falso 9 sería por algo. Veremos este domingo con el nuevo entrenador por dónde tira.

-¿Qué espera Azcona de esta temporada y para su futuro a sus todavía 21 años?

-Todavía no lo sé. De momento, acabar esta temporada con el Promesas, ganarme el puesto y los minutos y lo que tenga que venir, vendr