Un minuto de locura le da la victoria al Amorebieta en el descuento

Con un único y obligado cambio en línea defensiva, en la que compareció Amelibia en lugar del sancionado Kortazar, el Amorebieta buscó en el arranque del partido tener ese control que anticipaba Natxo González en la previa. Lo lograron en cierto modo los azules, que durante los primeros minutos dominaron el encuentro y generaron peligro, como el centro de Carbonell que se cruzó todo el área pequeña sin remate y un disparo de Pablo Hervías en el vértice de la pequeña que se le fue desviado antes del cuarto de hora.

Sin embargo, y de forma irremediable, el Barcelona Atletic fue poco a poco ganando protagonismo con la pelota hasta hacerse casi con el monopolio e imponer un ritmo muy lento que hizo que apenas si ocurrieran cosas sobre el húmedo verde de Urritxe. El filial blaugrana movía y movía de lado a lado tratando de encontrar huecos en un consistente Amorebieta, que defendía con líneas muy juntas y que se hartó de correr detrás del balón, lo que le limitó a la hora de salir a la contra.

Las ocasiones llegaron a cuentagotas. Y en el tramo final del primer periodo, fueron todas para el cuadro culé, que encontró en su banda derecha la principal vía para penetrar. A la media hora, Cedric disparó con potencia al lateral de la red tras una pérdida de Camacho. El mismo protagonista puso a prueba a Gaizka un par de lances después, con buena respuesta del meta de los zornotzarras. Al igual que hizo ante el disparo de Juan antes del descanso, atrapado con seguridad por el arquero fabril.

En el segundo periodo, Natxo González mandó a los suyos dar un paso adelante. Con líneas más adelantadas y más presencia con el balón, fueron dominadores de la situación ante un Barcelona Atlétic al que le costó habituarse a la nueva dinámica del partido. Le faltó asomarse algo más al balcón del área, pero cuando lo hizo fue con peligro. Iñigo Muñoz estuvo a punto de anotar pero su remate de cabeza en boca de gol le salió demasiado centrado.

Los minutos pasaban y el encuentro no terminaba de decantarse hacia ningún lado. El Amorebieta lo intentaba pero sin terminar de generar claro peligro. Y como tantas veces le ha ocurrido ya esta temporada, en una transición rápida el filial blaugrana logró adelantarse. Gaizka despejó como pudo el disparo de Barberá, pero la pelota le cayó muerta a los pies de Cedric, que anotó a placer cuando el partido agonizaba.

Faltaban solo cuatro minutos más el añadido y en Urritxe se había hecho el silencio. Pero lo mejor estaba por venir. El Amorebieta tocó a rebato y con empuje e intensidad se metió en el partido. Primero, avisó Carbonell, que perdonó el empate al mandar por encima del larguero un remate totalmente solo. Y después, un minuto de auténtica locura ya en el tiempo extra que le dio un revolcón al partido y al marcador. Fue el recién entrado Berto el que mandó a guardar un buen centro de Coulibaly para empatar. Y en la siguiente jugada, fruto de la presión alta, los azules robaron para que Kaxe le pusiera en bandeja el segundo tanto al propio Coulibaly. Incluso pudo llegar el tercer tanto para el Amorebieta, pero Astralaga salvó con una buena intervención el disparo de Kaxe.