Jesús Martínez | Jugador del Barakaldo CF

Primera Federación

«Como futbolista, con pequeños gestos, puedes hacer feliz a la gente»

El propio mediocentro explica a EL CORREO cómo se produjo aquello. «Acababa de terminar el partido, había muchos niños aquí, al lado del vestuario, y me pidió la camiseta, pero no se la podía dar. Entonces, me pidió las botas. En un principio, le dije que se las daba otro día, pero luego salí del vestuario y se las di porque todos hemos sido niños y nos gustaba que nuestros ídolos o los jugadores de fútbol tuvieran estos gestos», arguye. «No hay nada que me llene más que hacer feliz a un niño, me fui muy contento a casa al darle las botas y verle la cara de alegría», agrega. A pesar de su juventud, el cántabro es consciente de que «como futbolista, con pequeños gestos, puedes hacer feliz a la gente».

Quizás esa madurez la haya forjado al salir de su casa con trece años. En ese momento, abandonó la cantera del Racing de Santander para enrolarse en la del Levante. «Fue una decisión difícil, el primer mes lo pasé mal, quería volver a mi casa, llamaba a mis padres todas las noches y lloraba, pero me cuidaron muy bien en la residencia y, al final, estuve muy a gusto», manifiesta. Ese es el sacrificio que hacen muchos jugadores para tratar de alcanzar la élite. Aunque la gran mayoría no lo consiga. Jesús Martínez tiene claro que son experiencias que «te hace madurar y dejarte la piel por perseguir tu sueño de ser futbolista profesional».

En ese camino por cumplir su sueño, hace dos años, cambió Valencia por Valladolid. Allí le tienen en gran estima, es un canterano muy prometedor, que incluso, el curso pasado, fue convocado varias veces con el primer equipo, en Segunda División. Este verano decidió cambiar de aires y aterrizar en Lasesarre como cedido. «Renuevo con el Valladolid y quería dar el salto a una categoría con más nivel, el Barakaldo mostró interés en mí y lo vimos como una buena opción porque es un histórico y con muy buen nivel, así que lo decidimos para que creciera como jugador y persona», indica.

En este periplo de tiempo, Jesús Martínez ha disputado dos encuentros como titular y otros seis desde el banquillo. Es el decimotercer efectivo de la plantilla con más minutos -238-. La competencia que le presentan en su puesto Ekaitz Molina y Julen Huidobro es dura. Aunque, el centrocampista afirma que «lo llevo bien, siempre pienso que cada jugador tiene su momento en una temporada, hay que estar siempre preparado para dar el cien por cien y ganarse la confianza del míster cuando te da una oportunidad».

Eso es lo que hizo en el choque ante el Arenteiro, dónde no sólo anotó su primer gol en el Barakaldo, sino que también era su primera diana en el fútbol senior. El mediocentro recuerda que «acababa de salir del banquillo y fue en el primer balón que toqué, fue una sensación increíble que hacía mucho que no recordaba, no sabía ni cómo celebrarlo, se me pasaron muchas cosas por la cabeza, creo que me lo merecía y es la recompensa a mucho trabajo que hay detrás». Después le valió para ser titular en el Stadium Gal el pasado domingo frente al Real Unión.