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Fernando Romero
Domingo, 20 de octubre 2024
Urritxe despedía este sábado a sus jugadores en medio de una sonora ovación que agradecía el enorme esfuerzo hecho por los suyos para salvar un empate en el descuento, en un final de partido de auténtica locura. La lucha y entrega de los jugadores en el verde fue acompañada por una afición que jaleó y alentó a los suyos hasta el final. En el choque contra Unionistas se pudo ver a un Amorebieta que conectó con la grada, enchufado, intenso, batallador. El punto conseguido en sí mismo vale para poco, ya que los azules siguen en la zona roja de la clasificación, pero debe servir como punto de inflexión que relance a los zornotzarras.
«Estoy muy orgulloso de mis jugadores. Han sacado toda la casta, la garra, lo han dado todo. Estoy muy satisfecho con el ambiente, tengo que felicitarles. Este es el camino que tenemos que seguir para poder conseguir cosas», lanzaba un Julen Guerrero aún exaltado por todo lo sucedido en unos veinte minutos finales de locura en los que él mismo fue protagonista por una expulsión que no terminaba de entender. «Realmente no sé qué a pasado», decía al respecto.
El técnico portugalujo prefería poner el foco en el desempeño hecho por los suyos ante el conjunto charro en un encuentro que se puso muy pronto cuesta arriba y en el que siempre fueron a remolque. «El equipo ha demostrado entereza para levantarse de un 0-1 en el minuto dos, del mazazo que ha sido su segundo gol, luego empatamos y seguido nos meten el tercero, nos expulsan jugadores y metemos el 3-3. Porque no ha durado más, que si no igual hasta ganamos el partido», lanzaba encorajinado. «Espero que esto nos haga más fuertes. Los jugadores tienen que estar satisfechos de lo que han hecho, que vean el camino a seguir. Queda mucha temporada para conseguir cosas», proseguía el jarrillero.
El postrero empate, logrado cuatro minutos por encima del tiempo reglamentario, supuso un estallido de alegría al mismo tiempo que liberaba de tensión y presión a una plantilla que, esta vez sí, supo rehacerse de los golpes recibidos. Consciente de ello, Julen Guerrero lo ponía en valor. «Desgraciadamente, este años nos estamos encontrando con muchas dificultades, con muchas cosas en contra que tenemos que superar. De todo lo que hemos superado, este partido vale más que tres puntos», arengaba. «Nos llevamos uno solo pero han sido más que tres. Esto al equipo le tiene que reforzar en todos los aspectos», defendía.
«Son muchos golpes ya. Venimos trabajando mentalmente con ellos muy bien todas las semanas. Intentamos transmitirles las cosas que han hecho bien durante la temporada. Siempre lo he dicho, el equipo merece más puntos de los que tiene, pero al final los partidos han acabado como han acabado», relataba el titular del banquillo de Urritxe, que aprovechaba para lanzar un mensaje muy claro: «El equipo sigue muy vivo. Muy fuerte y muy vivo».
«El equipo tiene mucho potencial y era cuestión de tiempo que las ocasiones fueran entrando. No era normal que el equipo no llevara ningún gol hasta la jornada equis con todas las veces que habíamos llegado, con todo lo que hemos generado», argumentaba tras un encuentro en el que el Amorebieta marcó casi la mitad de los goles que lleva acumulados desde el inicio de la competición. «En algún momento tenía que darse la vuelta. El equipo poco a poco va encontrando ese rumbo, y creo que un poco de justicia al trabajo que está realizando», concluía.
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